El Ejército de Israel confirmó este lunes 15 de noviembre haber llevado a cabo bombardeos selectivos sobre 25 objetivos vinculados al Consejo Consultivo de Hizbulá en diversos puntos del Líbano. Estas operaciones tienen lugar mientras se mantienen negociaciones para alcanzar un posible acuerdo de tregua que, según fuentes cercanas, podría estar próximo.
Las acciones militares israelíes se concentraron en las regiones de Nabatieh, el valle de la Becá y Baalbek, así como en los suburbios de Dahye, en Beirut. De acuerdo con un comunicado del Ejército, los bombardeos tuvieron como objetivo “centros de mando del Consejo Consultivo de Hizbulá, así como instalaciones para el control, la recopilación de información y concentraciones de milicianos”. La declaración también señala que los ataques buscan “degradar la capacidad del Consejo Consultivo de Hizbulá para dirigir y apoyar las actividades terroristas contra Israel”. Lea: ¿Israel y Líbano estarían cerca de un acuerdo de alto al fuego?
Entre las bajas destacadas en el conflicto, se encuentra Hashem Safieddine, presidente del Consejo Consultivo de Hizbulá y primo de Hasán Nasrala, líder del grupo y su eventual sucesor. Safieddine y otros altos mandos fueron abatidos en bombardeos previos durante esta escalada.
El Ejército israelí también reveló haber ejecutado recientemente una serie de operaciones destinadas a interrumpir el contrabando de armas desde Siria hacia Hizbulá. Según un comunicado militar, uno de estos ataques destruyó un túnel de 3,5 kilómetros que conectaba ambos países.

Mientras continúan las hostilidades, las conversaciones mediadas por Estados Unidos han logrado avances significativos hacia un acuerdo de alto el fuego. Según una fuente cercana a las negociaciones, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, habría aceptado “en principio” la propuesta presentada por el enviado estadounidense Amos Hochstein. “Se han logrado progresos muy significativos”, declaró la fuente.
El plan de tregua incluye un proceso en tres fases que se desarrollaría en un plazo de 60 días. Entre las medidas contempladas, figura el repliegue de las fuerzas de Hizbulá al norte del río Litani, la retirada total de las tropas israelíes del sur del Líbano y el despliegue de fuerzas libanesas en esas áreas. Además, se esperan garantías de seguridad proporcionadas por Estados Unidos para respaldar la implementación del acuerdo.
El Gabinete de Seguridad israelí se reunirá este martes 26 de noviembre para evaluar los avances en las negociaciones y tomar decisiones sobre el curso de las operaciones militares. Mientras tanto, el panorama en la región sigue marcado por la tensión y la expectativa de un eventual alto el fuego que podría poner fin a esta reciente escalada del conflicto.