El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, anunció este martes que el gabinete de seguridad aprobó la propuesta de alto el fuego en Líbano por 60 días, aunque subrayó que Israel mantendrá su “libertad de acción” militar si el grupo chií Hizbulá incumple el acuerdo.
La duración del alto el fuego dependerá de lo que ocurra en Líbano, y nosotros mantendremos total libertad de movimiento”.
Benjamín Netanyahu (Primer Ministro de Israel)

La tregua, propuesta por Estados Unidos, fue respaldada por el gobierno israelí tras intensas negociaciones. Lea aquí: ¿Qué se sabe del cese al fuego entre Israel y Líbano?
Términos del acuerdo
El plan contempla tres etapas principales:
- Una tregua inicial, durante la cual Hizbulá deberá retirarse al norte del río Litani.
- La retirada total de las tropas israelíes del sur de Líbano en un plazo de 60 días.
- Negociaciones entre Israel y Líbano sobre la delimitación de la frontera, actualmente definida por la ONU tras el conflicto de 2006.
Netanyahu advirtió que Israel responderá con contundencia a cualquier intento de Hizbulá de rearmarse o reconstruir su infraestructura militar cerca de la frontera. “Si lanzan cohetes, cavan túneles, transportan misiles o intentan renovar su infraestructura terrorista, atacaremos sin vacilaciones”, enfatizó.
Uno de los puntos más polémicos del acuerdo ha sido la insistencia de Israel en conservar su capacidad de actuar militarmente dentro de Líbano, algo que tanto el gobierno libanés como Hizbulá rechazan. Netanyahu señaló que esta cláusula fue respaldada mediante una carta de compromiso emitida por Washington.
Frente a críticas de sectores de extrema derecha y de alcaldes de comunidades del norte de Israel, quienes temen por la seguridad de los residentes evacuados, el primer ministro aseguró que las tropas israelíes podrían reingresar a Líbano si fuera necesario. Recordó que, al igual que en Gaza, Israel no ha dudado en renovar las operaciones militares cuando las circunstancias lo requieren. Le puede interesar: Israel continua con ataques en Líbano, previo a reunión sobre una tregua
Netanyahu justificó el alto el fuego señalando que este es “el momento adecuado” para concentrarse en tres objetivos estratégicos: enfrentar la amenaza iraní, renovar la capacidad militar de Israel y aislar a Hamás en Gaza. “Sin el respaldo de Hizbulá, Hamás quedará debilitado, lo que aumentará nuestra presión sobre ellos y facilitará la liberación de nuestros rehenes”, explicó.
En cuanto al conflicto en Líbano, que ha causado más de 3.500 muertes en territorio libanés, Netanyahu afirmó que Israel ha alcanzado sus objetivos estratégicos.

Según el mandatario, la ofensiva ha desmantelado a Hizbulá, eliminando a su líder, Hasán Nasralá, y destruyendo gran parte de su arsenal y sus infraestructuras subterráneas. “Hemos hecho retroceder a Hizbulá miles de años. Lo que parecía ciencia ficción, hoy es una realidad gracias a nuestra estrategia”, aseguró.
Netanyahu concluyó destacando que la ofensiva en el norte fue planificada cuidadosamente para coincidir con la guerra en Gaza y con el ataque iraní con 181 misiles en octubre, asegurando que Israel está preparado para responder a cualquier desafío en el futuro.