El huracán Rafael, que atravesó la isla desde el sur hasta el norte con una intensidad de categoría tres, ha dejado una estela de devastación en Cuba, afectando severamente a la capital y provocando más de 460 derrumbes en edificaciones, así como la desconexión total del sistema eléctrico nacional, informaron autoridades locales este jueves.

Según información de EFE, Yanet Hernández, gobernadora de La Habana, destacó que se han registrado al menos 461 derrumbes totales y parciales en la ciudad, junto a una gran cantidad de árboles caídos y postes de luz en el suelo. Además, subrayó que, en las labores de recuperación, el personal de emergencia trabaja en la recolección de escombros y en el restablecimiento de servicios básicos, aunque enfrentan desafíos importantes en la reconexión eléctrica debido a los numerosos tendidos caídos. Lea aquí: Videos: así ha sido el paso del huracán Rafael por Cuba; causó nuevo apagón
El impacto de Rafael también afectó la operatividad del aeropuerto internacional José Martí y otras terminales, como la de Varadero, aunque ambas ya han iniciado los procesos de reanudación de actividades. “Es una tarea difícil sobre todo por los tendidos eléctricos caídos”, indicó Hernández al referirse a los apagones y los esfuerzos para restaurar la energía en las áreas afectadas.
La agencia EFE mencionó que con vientos máximos sostenidos de hasta 185 kilómetros por hora y lluvias que superaron los 200 litros por metro cuadrado, Rafael azotó el oeste de Cuba, afectando a más de cuatro millones de personas, incluidos los más de dos millones de habitantes de La Habana.

Las provincias de Artemisa y Mayabeque también reportan importantes daños en infraestructura y servicios, aunque, por el momento, no se han informado pérdidas humanas en ninguno de los territorios impactados.
Este ciclón, que representa un duro golpe para un país que enfrenta desde hace años una grave crisis económica y energética, provocó “cero cobertura energética nacional” por segunda vez en tres semanas, una situación de extrema gravedad en un contexto ya precario.
Las autoridades cubanas trabajan para restablecer el servicio en las zonas más afectadas, aunque advierten que será un proceso lento dadas las extensas áreas sin electricidad y las infraestructuras comprometidas.
En el marco de toda esta lamentable situación, equipos de apoyo y voluntarios de distintas zonas se han movilizado para asistir en las labores de limpieza y recuperación en La Habana y otras provincias afectadas, con el fin de restablecer la normalidad en el menor tiempo posible.
