En un nuevo episodio de las tensiones entre Rusia y Occidente, la justicia rusa condenó a Ksenia Karélina, una ciudadana ruso-estadounidense de 33 años, a 12 años de cárcel bajo la acusación de alta traición. La sentencia fue emitida este jueves, tras un proceso en el que la Fiscalía había solicitado inicialmente una pena de 15 años de prisión para Karélina, quien fue arrestada en enero en Yekaterimburgo, capital de los Urales, y detenida de manera preventiva desde febrero.
La acusación contra Karélina se centra en un giro de 51,80 dólares que la mujer realizó al Ejército ucraniano. Según el grupo de derechos humanos ruso Pervi Otdel, la transferencia se llevó a cabo el 24 de febrero de 2022, coincidiendo con el inicio de la invasión rusa a Ucrania. El dinero fue enviado al fondo “Razom for Ukraine” (Juntos por Ucrania), una organización creada por ucranianos residentes en Estados Unidos y destinada a la compra de avituallamiento, equipamiento bélico, municiones y armas para las fuerzas ucranianas. Lea aquí: En grave estado de salud líder opositor detenido en protestas en Venezuela
Inicialmente, Karélina fue detenida por un cargo menor de “gamberrismo” y sentenciada a 14 días de arresto. Sin embargo, su situación se agravó cuando, en febrero, las autoridades rusas la acusaron formalmente de alta traición por su apoyo financiero al Ejército ucraniano, lo que llevó a su traslado a prisión preventiva y al posterior juicio que culminó con la condena de este jueves.
A pesar de la gravedad de la acusación, la defensa de Karélina ha evitado comentar detalles específicos sobre el monto del dinero enviado, aunque el portal E1.ru señaló que la acusada se declaró culpable, con la esperanza de ser incluida en un futuro intercambio de prisioneros entre Rusia y Estados Unidos. Este tipo de canjes ha sido una herramienta diplomática utilizada por ambas naciones en los últimos años, y el caso de Karélina llega apenas dos semanas después de un significativo intercambio que involucró a 24 personas, incluido el periodista estadounidense Evan Gershkovich, detenido también en Yekaterimburgo por espionaje. Lea aquí: ¿Gobierno de Nicolás Maduro repetiría elecciones presidenciales en Venezuela?
El caso de Karélina ha suscitado críticas tanto dentro de Rusia como en el extranjero. Estados Unidos y la oposición rusa han acusado al Kremlin de utilizar a los ciudadanos extranjeros y presos políticos como monedas de cambio para negociar la liberación de rusos encarcelados en Occidente. Estas acusaciones se suman a las tensiones ya existentes entre Moscú y Washington, en un contexto internacional marcado por la guerra en Ucrania y las crecientes sanciones occidentales contra Rusia.
Karélina ahora enfrenta una larga condena en una prisión rusa, mientras las especulaciones sobre un posible intercambio de prisioneros continúan. Sin embargo, el desenlace de su caso podría depender de las complejas y tensas negociaciones diplomáticas entre dos potencias que siguen en desacuerdo en numerosos frentes.