La tarde del pasado 23 de abril, los contratistas que trabajaban en el techo de Family Fare, 2026 N. Saginaw Road, tropezaron con la extraña morada de la mujer dentro del letrero puntiagudo de la tienda que daba al estacionamiento de la plaza, dijo el oficial de Policía de Midland, en el estado de Michigan, Brennon Warren.
La Policía de esta ciudad estadounidense acudió a la escena y encontró que la mujer, de 32 años, había creado un espacio habitable en el letrero, completo con un pequeño escritorio, una planta de interior, una impresora, una cafetera Keurig y un cubículo lleno de comida, dijo Warren.
Si uno se parara en el estacionamiento y mirara el letrero, no vería nada que indicara que alguien estuviera viviendo adentro, dijo Warren. Lea aquí: Capturan en Panamá a miembros de una red de tráfico de migrantes chinos
El descubrimiento de la inesperada habitante del lugar lo realizaron contratistas de la tienda de Midland, Michigan, después de que notaron que alguien estaba pasando un cable de extensión hasta el techo, donde hay un enchufe.
“Es una historia que te hace rascarte la cabeza, simplemente alguien viviendo en un letrero. Había algunos pisos que estaban colocados. Un mini escritorio, su ropa. Una cafetera Keurig. Una impresora y una computadora, cosas que tendrías en tu casa”, dijo el jueves en una rueda de prensa el oficial de policía de Midland, Brennon Warren.
“Honestamente, no sé cómo llegó hasta allí. Tampoco lo indicó”, explicando que no había señales de una escalera.
Brennan explicó que se puede acceder al letrero de cinco pies de ancho y ocho pies de alto desde el techo de la tienda y tiene una puerta. Lea aquí: La ONU niega haber rebajado a la mitad el número de víctimas en Gaza
El descubrimiento de la inesperada habitante del lugar lo realizaron contratistas de la tienda de Midland, Michigan, después de que notaron que alguien estaba pasando un cable de extensión hasta el techo, donde hay un enchufe.
Le puede interesar: ‘El Portal’ que tiene conexión visual en tiempo real entre Nueva York y Dublín ha protagonizado vulgares usos
Los oficiales hablaron con la mujer y determinaron que había estado viviendo en el letrero durante aproximadamente un año. No compartió cómo logró subir al techo o entrar por una pequeña puerta de acceso en la parte trasera del letrero.