El volcán de Agua, ubicado en el oeste de Guatemala, enfrenta un desafiante incendio forestal que, hasta la fecha, ha devastado alrededor de 50 hectáreas de su rica vegetación. Este viernes, por tercer día consecutivo, equipos de rescate y socorristas se afanan en combatir las llamas que amenazan este emblemático coloso de 3,760 metros de altura. Lea aquí: Indígenas mayas de Guatemala, preocupados por el incendio en volcán de Agua
Las operaciones de combate al fuego se reactivaron desde el alba en los flancos sur y en el cráter del volcán, en un esfuerzo por contener la propagación del incendio. Según reportes de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), el control sobre el fuego ya alcanza más de un 40%. No obstante, expertos, como César George del Instituto Nacional de Meteorología, han expresado preocupación por cómo las condiciones climáticas, especialmente las corrientes de aire, podrían facilitar la expansión del fuego.
Este incendio no solo ha causado un daño considerable a la vegetación sino que también ha puesto en peligro a la fauna local, incluyendo especies como pumas, pizotes, tigrillos, y osos hormigueros, además de diversas aves.
La situación es crítica a nivel nacional, con 30 incendios forestales reportados el jueves en Guatemala, de los cuales 22 permanecen activos, según Conred. Frente a esta ola de incendios, se ha instado a la población a preparar rutas de evacuación.
En respuesta a la emergencia, se ha establecido un centro de coordinación en el municipio de Santa María de Jesús, asentado en las faldas del volcán de Agua, desde donde la Conred dirige los esfuerzos para sofocar el fuego. La vicepresidenta de Guatemala, Karin Herrera, supervisó personalmente las operaciones, destacando el despliegue de más de 500 personas, 38 vehículos, además del uso de avionetas y helicópteros, incluido el helicóptero presidencial, para lanzar agua sobre las áreas afectadas. Lea aquí: Video: trágico accidente en la vía que conduce de Ibagué a Bogotá
Este esfuerzo masivo no solo busca frenar el avance de las llamas, sino también preservar la vida silvestre y proteger a las comunidades cercanas. Las brigadas, empleando técnicas como las ‘brechas cortafuegos’, continúan su lucha contra el fuego con la esperanza de controlar totalmente el incendio en los próximos días, según afirmó la vicepresidenta Herrera.