La agencia de la ONU describió la tormenta como “la más mortífera registrada en África” y alertó de que los menores se están viendo afectados por la falta de servicios esenciales, como salud, escolarización y suministro de agua potable.
“Ahora es el momento de centrarse en la recuperación, incluido el apoyo a la reapertura de escuelas, brindar apoyo psicosocial, rehabilitar las instalaciones de atención primaria de salud y restaurar los sistemas de agua. La tragedia no ha terminado y no debemos olvidar a los hijos de Derna y Al Bayda”, declaró Adele Khodr, directora regional de Unicef en Oriente Medio y el Norte de África, tras su reciente visita a estas localidades afectadas. Lea aquí: Triste hallazgo: encuentran 110 delfines de río muertos en la Amazonía
Se desconoce el número de niños fallecidos, pero Unicef advierte de que los menores representan alrededor del 40% de la población.
De las 117 escuelas afectadas, la agencia internacional ha confirmado la completa destrucción de cuatro de ellas y en otras 80 se han registrado daños parciales. Lea aquí: Lula se recupera con éxito tras cirugía de implante
Las lluvias torrenciales del ciclón Daniel que afectaron el noreste de Libia la noche del pasado 10 al 11 de septiembre provocaron virulentas riadas e inundaciones agravadas por la ruptura de dos presas en Derna, la localidad más afectada, que ha dejado decenas de miles de damnificados.
La Organización Mundial de las Migraciones (OIM) informó de que la tormenta ha desplazado a más 40.000 personas.
Hasta el momento, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha confirmado más de 4.000 muertes y se estima que otras 8.000 personas están desaparecidas, ante la falta y confusión de datos aportados por las autoridades locales.