“Corinna y el Rey”. Parece el nombre de un cuento de hadas pero, en realidad, es un pódcast que está causando revuelo en Europa.
En él, la empresaria danesa-alemana Corinna zu-Sayn Wittengenstein revela detalles íntimos de su relación extramatrimonial de años con el rey emérito de España, Juan Carlos I, al tiempo que sigue en Londres su demanda judicial contra su ahora examante.
El pódcast fue producido por el estudio de contenidos Project Brazen, cofundado por los periodistas Tom Wright y Bradley Hope, junto con PRX, y se estrenó el lunes 7 de noviembre del 2022 en inglés y español de manera gratuita. Puede escuchar algunos de los episodios haciendo clic en este enlace.
Son ocho capítulos en los que la empresaria da detalles de cómo el entonces soberano de España, al que conoció en el mundo de las cacerías, la sedujo y de la relación que se entabló entre ellos, hasta el punto de que ella se sentía como si fuera no solo su novia sino su esposa, pese a que él, dice, tenía múltiples amantes. Lea aquí: El trago personal más duro para Felipe VI en su reinado
“Corina y el rey” narra “una relación romántica que atravesó continentes en secreto, pero cuyo desarrollo abriría la ventana a un peligroso mundo de codicia, corrupción, violencia, riqueza oculta, espionaje internacional, conspiración, hedonismo y caza de elefantes, todo ello relacionado con una de las realezas más reservadas del mundo”.
El relato de Corinna “se contextualiza con docenas de entrevistas, entre las que se encuentran corresponsales y biógrafos reales de larga trayectoria, historiadores expertos, jefes de la inteligencia española, exagentes del FBI y un comisario de policía encubierto”, señalan en su nota.
Algunas revelaciones
“Lo veía volver de los viajes y era feliz, como un niño de 5 años. Llevaba bolsas llenas de dinero en efectivo. Yo me quedaba sin palabras y le decía: «Dios mío, ¿qué es esto?» Y era como: «Ah, esto es de mi amigo, esto de ese otro». Parecía una situación muy habitual [...]. Si le hacía alguna pregunta me respondía: «Ay, eres tan dramática. ¿No entiendes cómo funciona España?» No, claramente no lo entendía”.
“Obviamente, estaba destinado a ser una especie de nombre en clave, pero como tiene esta voz tan resonante y distintiva, cuando mis asistentes descolgaban el teléfono, todas sabían que era el rey de España”.
“Me llamaba probablemente 10 veces al día, cada día me enviaba flores, cartas, me envió centenares de cartas [...]. Expresaba sus emociones de manera profunda. No eran cartas de amor estereotipadas, eran cartas de amor muy sinceras. Todas escritas a mano y en ellas hablaba sobre cómo me echaba de menos. Claramente, parecía que echara de menos a una persona con la que poder hablar de todo”.
“Cuando la gente habla de una aventura y me dicen la amante, no es que sea despectivo, es que no describe con precisión la profundidad y la amplitud de esta relación. Nunca me había sentido tan vinculada a alguien como con el rey de España. En mi corazón, él era mi marido”.
Corinna asegura que el rey le pidió matrimonio y le regaló un anillo de compromiso enorme. Incluso, Juan Carlos I fue a pedirle la mano al padre de la empresaria.
“Siempre fui muy discreta, sólo sabían sus amigos íntimos de Madrid nuestra relación. Si teníamos una cena, me ponía el anillo. Estaba orgulloso de ello, se lo enseñaba a sus amigos y todas las esposas lo querían ver. Sólo tuve la precaución de llevarlo en reuniones donde pudieran surgir rumores en torno al palacio”.
“Llegó en un momento en el que la relación se había convertido en algo muy serio. Obviamente él estaba casado, así que lo tomé como una señal de lo mucho que significaba para mí. Fue algo más simbólico que vinculante”.
Por otra parte, Corinna cuenta el contenido de las cartas de amor que le enviaba el Rey de España: Una de ellas, recuerda, muy cursi con el skyline de Miami. “Ángel mío, cuento las horas y segundos para verte, tenerte entre mis brazos, cuidarte, necesitarte, adorarte”...
Pero no todo era color de rosas: en el episodio 3, Corinna cuenta cómo se dio cuenta de que el rey llevaba tres años engañándola con otra mujer.
