En un comunicado, el palacio de Buckingham ha informado este jueves, 8 de septiembre, que la reina Isabel II falleció luego de permanecer bajo supervisión médica en el castillo de Balmoral, en Escocia. Lea: Médicos de la reina Isabel II están “preocupados por su salud”
La salud de la Reina, que hace tiempo que experimentaba “problemas de movilidad”, emperoró desde que el martes recibió en Balmoral a Boris Johnson, quien le presentó su dimisión como primer ministro, y su sucesora, Liz Truss, a quien encomendó la formación de un Gobierno.
Truss, primera ministra del Reino Unido, dijo que el país está “profundamente preocupado por las noticias que llegan del palacio de Buckingham”.
Pero, ¿qué pasó luego de la confirmación de la muerte de Isabel II?: se activó de inmediato el ‘London Bridge is Down’ (Operación Puente de Londres). Según dicta el protocolo, una vez se confirma el fallecimiento de la reina comienza el “Día D”, conocido en inglés como “D-Day”.
En primera instancia, se dio la noticia al Primer Ministro, quien llamó en clave y anunció que “el Puente de Londres ha caído”, así se enteró el Secretario de Gabinete, y desde ahí, por orden de prevalencia, las diferentes autoridades, quienes debieron mantener discreción con la noticia.
Acto seguido, el Centro de Respuesta Global del Ministerio de Exteriores británico informó a los gobernadores generales de las 15 naciones que comparten con el Reino Unido a la monarca como soberana, además de a los gobiernos de los otros 36 países que conforman la Commonwealth.
Las puertas del palacio de Buckingham se iluminaron y se colocó un tablón de color negro. Asimismo un flash de noticias alertó a los medios de comunicación de todo el mundo.
El mismo día de la muerte, el hijo mayor de la Reina Isabel II, Carlos, se convierte en rey. Por su parte, la bolsa de valores, las empresas y las tiendas de Reino Unido cierran por respeto.
Carlos dará su primer discurso oficial como Rey y el gobierno jurará lealtad al sonido de una salva de 41 cañonazos en Hyde Park.
Se espera ahora que el Gobierno británico decrete nueve días de luto oficial en el Reino Unido y durante los ocho primeros se celebrarán las procesiones ante el féretro y en el noveno, el Big Ben hará sonar su campana con un tono más solemne de lo habitual a las 9.00. Dos horas después, se dará comienzo el funeral en la Abadía de Westminster, que será retransmitido mundialmente. Una vez finalizado el acto religioso, el cadáver de la reina será trasladado hasta Windsor, donde quedará enterrado en la cripta real del castillo.