En lejanías de la isla de Tanna, que pertenece al archipiélago de Vanuatu, ubicado en el Pacífico Sur, existe una tribu denominada Taohnanen. Ellos tenían la costumbre de rezarle todos los días al Duque Felipe, de Edimburgo, quien fuese esposo de la Reina Isabel II de Inglaterra, y que falleció hace varios días a sus 99 años de edad en su residencia real.
Los Taohnanen veían a Felipe como una real deidad que encarnaba un espíritu volcánico. Le rezaban y se encomendaban a él para que supuestamente les protegiera sus cultivos, pero con su fallecimiento enfrentan en un proceso de duelo que, dicen, no podrán superar tan rápido.

La tribu se enteró de la noticia justo cuando se levantaban a cosechar, pues una mujer, a quien al principio no le creían, confirmó el deceso. Lloraron hombres y mujeres al tiempo en que intentaban consolar a los niños. Las fotos que ellos tienen de Felipe fueron enviadas por el mismo príncipe quien le escribió a los pobladores durante años.
Según informes, el Movimiento Príncipe Felipe se habría cimentado por la visita de la pareja real en 1970, tiempo en que el duque participó en rituales para beber kava.
“En 2007 nos llevaron a Inglaterra. La conexión entre la gente de la isla de Tanna y los ingleses es muy fuerte. Le enviamos nuestras condolencias a la familia real y a los ciudadanos de Inglaterra”, dijo Yapa, jefe de la aldea Yaohnanen.
A través de un video donde aparecen varios de la tribu, ofrecieron sus condolencias a la familia real. Además, realizaron un ritual en homenaje a la pérdida del duque que duraría varias semanas.