Hace tres años Joshua Aversano perdió la vida en un accidente de tránsito cuando tenía apenas 21 años. La familia del joven decidió donar su rostro.A través de un trasplante, la cara de Joshua le fue dada a Richard Norris, un hombre que había sufrido una severa desfiguración de rostro luego de un accidente con una escopeta en 1997.Norris se sometió a una de las cirugías más complejas de la historia. El procedimiento demoró 36 horas y sólo tenía 50% de probabilidades de sobrevivir. Norris decidió arriesgarse pues anteriormente se había sometido a varias cirugías reconstructivas sin ningún éxito.El hombre de 39 años se ocultaba en su casa, salía sólo por las noches y sufría de profundas depresiones.En 2012, la esperanza llegó a la vida de Norris cuando la familia Aversano decidió donar el rostro de Joshua. Norris recibió dientes, mandíbula, músculos de la lengua y nervios.La hermana de Joshua, Rebekah Aversano se ha encontrado con Richard Norris, en una historia contada en el programa 60 minutos en Australia.Al encontrarse con Norris, Rebekah le pregunta si puede tocar su rostro, el hombre le responde que sí. Finalmente le dice: “Esta es la cara con la que crecí”.Richard Norris contó su historia el año pasado para la revista GQ, de la que fue portada. Rebekah Aversano con Richard Norris durante su encuentro. Captura Video