El presidente palestino Mahmud Abás dijo hoy miércoles que los palestinos ingresarán a la Corte Penal Internacional, una medida que prepara el terreno para presentar cargos por crímenes de guerra contra Israel.
Abás hizo el anuncio en Cisjordania después que en la víspera el Consejo de Seguridad de la ONU rechazó un proyecto de resolución que hubiera impuesto un plazo para que Israel abandonara la ocupación de territorios reclamados por los palestinos para su estado.
Abás había advertido que, de ser derrotado en la votación en la ONU, reanudaría una campaña palestina para ingresar a organismos internacionales y de esa manera presionar a Israel.
Se espera una dura respuesta de Israel, cuya posición es que las disputas se deben resolver mediante negociaciones de paz, y que medidas como ésas tienen por objeto soslayar las negociaciones.
La votación fue un golpe para la campaña árabe en favor de acciones internacionales que ayuden a lograr un estado palestino independiente.
Los palestinos llevan tiempo interesados en sumarse a la corte internacional para presentar cargos contra Israel por supuestos crímenes de guerra. Sin embargo, la membresía podría exponer a los palestinos a acusaciones similares.
El negociador palestino Saeb Erekat había anticipado que la autoridad palestina podría fijar una fecha para solicitar su membresía a la CPI y otras agencias internacionales.
"No habrá más esperas, no más dilación, no más demora", dijo Erekat. "Vamos a reunirnos y tomar decisiones".
Frustrados por el moribundo proceso de paz, los líderes palestinos en Cisjordania han adoptado una estrategia más directa hacia Israel y Estados Unidos al pedir un reconocimiento internacional más amplio para un estado palestino.
En 2012, la ONU aceptó a Palestina como estado observador no miembro. El siguiente paso de los palestinos fue una propuesta ante Naciones Unidas que estableciera un calendario de retirada de Israel de tierras de Cisjordania y Jerusalén Este, ocupadas en la guerra árabe-israelí de 1967.
Estados Unidos, el aliado más cercano de Israel, votó el martes en contra de la resolución en la ONU, insistiendo en que se establezcan negociaciones en lugar de un calendario impuesto.
"Quiero expresar mi gratitud y aprecio a Estados Unidos y Australia", dijo el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu el miércoles. Agregó que había recibido garantías de los presidentes de Nigeria y Ruanda de que no respaldarían la propuesta de resolución.
"Ellos respetaron sus promesas y eso inclinño la balanza", dijo Netanyahu.
Entre los países que votaron a favor de la resolución estaban Francia y Luxemburgo, reflejando una creciente impaciencia, especialmente en Europa, por la falta de progresos tras más de dos décadas de conversaciones de paz intermitentes.