La película producida en Estados Unidos y que denigra a Mahoma ha provocado protestas violentas en el mundo musulmán que han dejado decenas de muertos, incluso el embajador estadounidense en Libia.
En Bangladesh, la policía empleó gases lacrimógenos y usó sus garrotes ayer para dispersar a los manifestantes, miembros de una decena de grupos islámicos, que les arrojaban piedras. Los inconformes incendiaron varios vehículos, incluso una camioneta policial, dijeron testigos.
Decenas de manifestantes fueron arrestados en las calles y en el Club Nacional de Prensa, donde los participantes se refugiaron, dijo un policía de Daca a condición de no ser identificado debido a la política de la institución.
El enfrentamiento comenzó cuando las autoridades intentaron detener la manifestación, informó la policía. Las autoridades han prohibido toda protesta cerca de la mezquita principal en Baitul Mokarram desde el viernes, cuando más de 2.000 personas marcharon y quemaron una efigie del presidente estadounidense Barack Obama.
Los manifestantes convocaron a una huelga nacional hoy para protestar por la acción policial.
En Pakistán, los manifestantes _del grupo religioso Minhaj-ul-Quran _ marcharon por las calles de Islamabad y se reunieron cerca del Parlamento mientras entonaban lemas contra el cineasta y exigían se le castigue.
Unos 200 estudiantes en Srinagar, la principal ciudad en el sector de Cachemira controlado por India, gritaron “¡Abajo Estados Unidos!” y “’Viva el islam!” en una protesta pacífica.
El ministro pakistaní de los Ferrocarriles, Ghulam Ahmed Bilur, ofreció una recompensa de 100.000 dólares por la muerte del director del video.
“Anuncio hoy (ayer) a ese blasfemo que ha abusado del sagrado profeta que si alguien le mata daré a esa persona una recompensa de 100.000 dólares”, dijo el ministro a la prensa en Peshawar, e invitó a los talibanes y a la red Al Qaeda a participar de esta “noble acción”.
Las protestas contra el video, se extendieron por todo el mundo musulmán y desde el 11 de septiembre ya dejaron 50 personas muertas.
