La organización humanitaria Human Rights Watch (HRW) llamó este miércoles a las autoridades libias a que garanticen a Saif al Islam, hijo del ex dirigente Muamar Gadafi, el “acceso inmediato” a un abogado, aunque notó que se encontraba detenido “en buenas condiciones”.
“Las autoridades libias parecen mantener a Saif al Islam en buenas condiciones materiales, pero le deben permitir el acceso inmediato a un abogado”, indicó la entidad en un comunicado.
HRW afirmó haber visitado a Saif al Islam el pasado 18 de diciembre en su lugar de detención, en Zenten, a unos 180 kilómetros al sudoeste de Trípoli, gracias a una autorización concedida por el fiscal general libio, Abdelaziz al Hasadi, a cargo del caso.
Fred Abrahams, consejero especial de HRW, mantuvo una entrevista de media hora con el prisionero.
“Saif al Islam Gadafi afirma que lo mantienen bien alimentado y con cuidados médicos. No tiene quejas relativas a las condiciones materiales de su detención”, señaló Abrahams en un comunicado.
“Su preocupación principal es la falta de acceso a su familia y a un abogado para defender su causa”, añadió el texto.
De acuerdo a HRW, Saif al Islam apenas se quejó de lo que él mismo llamó “aislamiento total” del mundo exterior.
Ningún familiar o amigo ha podido entrevistarse con el prisionero por “razones de seguridad”.
Al Hasadi, en tanto, informó a HRW que el Saif al Islam tendrá acceso a un abogado después de finalizados los preparativos en Trípoli para tener un centro de detención de seguridad máxima.
El funcionario añadió que el hijo de Muamar Gadafi incluso pasó por una intervención quirúrgica en tres dedos derecha, heridos, según dijo, durante un ataque de la OTAN que provocó la muerte de 26 de sus acompañantes.
