Un equipo de socorristas iraníes espera llegar pronto al lugar donde se encuentran 13 buzos atrapados bajo el agua después de que su barco de apoyo se hundiera hace dos días en el Golfo Pérsico, dijo un funcionario iraní.
Pirouz Mousavi, director de la Zona de Energía Pars en el sur de Irán, dijo el viernes a la agencia oficial de noticias IRNA que se cree que los buzos están todavía con vida a pesar de la menguante reserva de oxígeno.
Los buzos (siete indios, cinco iraníes y un ucraniano) forman parte de un equipo que estaba instalando un oleoducto submarino y estaban dentro de una cámara presurizada de buceo cuando el barco Koosha-1 se hundió el jueves debido al tempestuoso mar.
De las 73 personas que iban a bordo, 60 ya fueron rescatadas.
La cámara presurizada está a unos 60 metros (180 pies) bajo el agua y puede almacenar hasta 72 horas de oxígeno.
