En su carta de dimisión dirigida al primer ministro, David Cameron, Liam Fox reconoció haber “permitido equivocadamente que se difuminara el límite entre mi interés personal y mis actividades gubernamentales”.
“Las consecuencias de esto han sido claras en los últimos días. Lo siento mucho”, agregó este miembro del ala dura del Partido Conservador, que mantendrá su escaño de diputado en la Cámara de los Comunes.
Fox, de 50 años, es el segundo ministro que renuncia desde la llegada al poder de la coalición de conservadores y liberaldemócratas en mayo de 2010.
Cameron dijo poco después que “entendía las razones” del titular de Defensa, pero dijo “sentir mucho” que se fuera y destacó el “papel clave” que desempeñó en la operación internacional en Libia.

