En Arlington, Virginia, el lunes por la noche, una situación impactante y peligrosa se desarrolló cuando una casa explotó mientras la policía intentaba llevar a cabo una orden de registro. El incidente se desencadenó a partir de informes previos sobre disparos provenientes de una residencia de Burlington Street. Según la portavoz del Departamento de Policía del condado de Arlington, Ashley Savage, el sospechoso implicado había estado disparando una pistola de bengalas desde su casa durante el día. Policía de Colombia y Brasil acaban red de minería ilegal en selva amazónica
En respuesta a estos informes, la policía obtuvo una orden de registro para la residencia y trató de establecer contacto con el sospechoso, quien se negó a salir y permaneció atrincherado. Durante este tenso enfrentamiento, el sospechoso disparó varias balas desde el interior de la casa, y alrededor de las 8:25 p.m., se produjo una explosión que devastó la vivienda, enviando escombros y llamas a los alrededores.
Aunque tres agentes resultaron con heridas leves, afortunadamente no se reportaron hospitalizaciones. El Departamento de Bomberos de Arlington logró controlar el incendio alrededor de las 10:30 p.m., pero continuaron combatiendo pequeños focos de fuego y evacuando a los habitantes de casas aledañas mientras persistía la amenaza de fuego en un acto necesario para garantizar la seguridad de los residentes.
Por su parte, la Oficina de Campo del FBI en Washington, DC, brindó asistencia en la investigación y las autoridades están trabajando para esclarecer las circunstancias detrás de esta explosión sin precedentes.