El actor estadounidense James Ransone, reconocido por sus recordados papeles en The Wire y It: Capítulo Dos, murió el pasado viernes en Los Ángeles a los 46 años, una noticia que generó conmoción en la industria del entretenimiento y entre los seguidores de su trabajo.
La Oficina del Médico Forense del Condado de Los Ángeles confirmó que la causa de la muerte fue suicidio.
De acuerdo con el reporte oficial, el cuerpo del actor fue hallado colgado en un cobertizo y la investigación ya fue cerrada, sin indicios de la participación de terceros. Sus restos fueron puestos a disposición de sus familiares. Lea: Paramount insiste en su propuesta para evitar que Netflix adquiera Warner Bros
¿Quién era James Ransone?
Ransone, nacido el 2 de junio de 1979 en Baltimore, Maryland, construyó una carrera sólida y respetada, especialmente en televisión y cine de género. Aunque rara vez fue protagonista absoluto, se destacó por dar vida a personajes secundarios de gran fuerza narrativa, capaces de dejar huella en cada historia.
Uno de sus roles más emblemáticos fue el de Chester “Ziggy” Sobotka en la segunda temporada de The Wire (HBO), una de las series más influyentes de la televisión contemporánea. En esa producción, Ransone interpretó a un trabajador portuario atrapado entre la frustración personal y el mundo del crimen organizado, un personaje que se convirtió en uno de los más recordados de la ficción creada por David Simon.

Años después, en 2019, alcanzó una mayor visibilidad internacional al interpretar la versión adulta de Eddie Kaspbrak en It: Capítulo Dos, la esperada secuela de la adaptación cinematográfica de la novela de Stephen King. Su actuación fue bien recibida por los fanáticos de la saga, quienes destacaron su capacidad para mantener la esencia del personaje en su transición a la adultez.
Su trayectoria incluyó también participaciones destacadas en la miniserie Generation Kill, donde dio vida al cabo Josh Ray Person, así como en producciones como Bosch, Poker Face, The Black Phone y su secuela Black Phone 2, V/H/S/85, Sinister y Tangerine, entre otras. A lo largo de más de dos décadas, Ransone se movió con soltura entre el cine independiente y las grandes producciones, consolidando una filmografía diversa.
En cuanto a su formación, el actor estudió en el Carver Center for Arts and Technology en Maryland y continuó su preparación artística en Nueva York. Su debut en el cine se produjo en 2002 con la película Ken Park, trabajo que le abrió las puertas a proyectos de mayor alcance en televisión.
En los últimos años, James Ransone había hablado públicamente sobre aspectos difíciles de su vida personal, incluidas experiencias traumáticas en su adolescencia y problemas de adicción que logró superar. Su testimonio fue valorado por muchos como un aporte honesto a la conversación sobre salud mental dentro de la industria del entretenimiento. Lea: Murió famoso actor de Netflix a sus 55 años tras caer del techo de su casa
Tras conocerse la noticia de su muerte, colegas, directores y seguidores expresaron mensajes de despedida y reconocimiento a su talento, resaltando su compromiso con cada papel y su capacidad para aportar profundidad emocional a las historias que contaba.
James Ransone deja un legado marcado por actuaciones intensas y memorables, y su partida vuelve a poner sobre la mesa la importancia de hablar abiertamente sobre la salud mental y el acompañamiento emocional, incluso en entornos donde el éxito profesional no siempre refleja el estado interior de quienes lo alcanzan.

