La familia de Meghan Markle, la duquesa de Sussex, vive días de preocupación debido a la delicada situación médica de su padre Thomas Markle. Aunque los detalles se han conocido de manera gradual a través de medios internacionales, trascendió que el padre de la duquesa atraviesa una emergencia de salud que generó inquietud.
A finales de noviembre comenzaron a circular reportes sobre el deterioro de la salud del estadounidense, quien reside desde hace varios años en Filipinas. Lo que inicialmente parecía una molestia en una de sus extremidades terminó convirtiéndose en una urgencia médica. Según información confirmada por fuentes próximas, Markle tuvo que ser trasladado rápidamente a un centro hospitalario de mayor complejidad en Cebú, donde los especialistas identificaron un daño más severo del previsto.
Los médicos hallaron un coágulo que afectó la circulación en su pierna izquierda y provocó un deterioro acelerado del tejido. De acuerdo con testimonios citados por diversos medios internacionales, el pie había perdido vitalidad y presentaba signos de necrosis, por lo que una intervención inmediata era la única opción para preservar su vida. Ante la gravedad del cuadro, el equipo médico realizó una amputación por debajo de la rodilla en una cirugía que se extendió durante aproximadamente tres horas.
El estado de salud de Thomas Markle
Tras la intervención, Thomas Markle fue ingresado en una unidad de cuidados intensivos, donde permanece bajo estricta vigilancia. Especialistas consultados por la prensa extranjera señalan que la prioridad es evitar infecciones severas, como sepsis o gangrena, riesgos comunes en casos de esta complejidad. Su recuperación y movilidad futura dependerán del proceso de cicatrización y del inicio de terapias una vez su estado se estabilice.
La noticia volvió a poner al padre de la duquesa en el centro de la conversación pública, especialmente por la atención mediática que rodea a la familia desde la boda de Meghan Markle con el príncipe Harry. En este contexto, un portavoz de la duquesa confirmó que ella ha intentado comunicarse con él para conocer directamente su estado de salud, un gesto que genera interés debido a la relación distante que ambos mantienen desde hace años.
Por ahora, no se han divulgado nuevos informes médicos ni se conoce el tiempo estimado de hospitalización. Lo cierto es que la familia atraviesa un escenario sensible, marcado por la incertidumbre y por un proceso de recuperación que será largo y exigente para Thomas Markle, quien continúa acompañado por personas cercanas en Filipinas mientras avanza su evolución clínica.