Hace 10 años nació en Hong Kong, China, un muñeco de peluche al que bautizaron Labubu. De inmediato se convirtió en el juguete preferido de los niños y adolescentes de ese país. Lo diseñó el hongkonés Kasing Lung quien dijo que se trataba de un “amigo y compañía tierna para todos”.
No pasó mucho tiempo para que el tierno peluche coleccionable también fuera aceptado por adultos, logrando un éxito en Asia que poco a poco llegó a Europa y ahora se encuentra en América, y como no, en Colombia. Lea: Hombres armados atacan estación de Policía en Arenal del Sur, Bolívar

Los creadores afirman que el muñeco es la adaptación de un cuento llamado The Monsters, influenciado por el folclor nórdico y la mitología. Además, añaden que en el mundo de Labubu están los personajes Mokoko, Pato, Spooky, Tycoco, este último sería el novio de Labubu, quien tiene aspecto de esqueleto, pero con características tiernas y emotivas.
Labubu es una estrella, y como toda estrella, se vende en diferentes presentaciones, colores y aspectos. Además, hay cientos de personas en el mundo hablando de este producto, y no todo lo que dicen es positivo.
Historia macabra detrás del tierno muñeco de peluche Labubu

Investigadores han realizado escritos, videos y otros mecanismos de comunicación para contar lo que consideran es la verdadera historia del peluche viral.
Aseguran que Labubu es una representación del demonio Pazuzu, perteneciente a la mitología mesopotámica. Una de las teorías que existe en las redes sociales es que el peluche estaría activando un culto inconsciente de Pazuzu, considerado el demonio de los vientos.
Pazuzu, según la mitología, puede causar daños y mal a quien desee, pero también puede usarse para la protección contra otros demonios, sobre todo para las mujeres embarazadas y los niños.

También se supo que Pazuzu era usado como amuleto que las personas usaban en sus bolsos y ropa para cuidarse de todo mal, lo que tiene un parecido con los llaveros que actualmente se comercializan de los Labubus en todo el planeta.
Algunos consideran que es un circulo conspirativo y que no hay sustento científico y real sobre la historia demoniaca del peluche, pero otros aseguran que su parecido físico y particularidades tiene mucha concordancia y prefieren tener precaución con ellos.