Manuel Masalva, reconocido actor mexicano que alcanzó proyección internacional por su papel como Ramón Arellano Félix en Narcos: México, rompió el silencio este lunes 7 de julio tras vivir una experiencia límite: estuvo 105 días hospitalizado y en estado crítico, luego de contraer una bacteria durante unas vacaciones en Asia.
La noticia sacudió al mundo del espectáculo en marzo pasado, cuando la familia del actor reveló que se encontraba en estado grave en un hospital de Dubái, tras haber adquirido una infección de origen desconocido mientras se encontraba en Filipinas.
Masalva, de 44 años, había viajado al continente asiático por turismo, sin imaginar que aquel descanso terminaría convirtiéndose en una lucha por su vida. Lea: Famoso actor de Narcos y La Guzmán lucha por su vida contra peligrosa bacteria
Ante la gravedad de su estado, su familia lanzó un emotivo llamado en redes sociales, solicitando ayuda económica para afrontar los altísimos costos del tratamiento médico en el extranjero.
“Debido a una bacteria desconocida, nuestro querido Manuel Masalva se encuentra en un hospital en el extranjero, en condición de gravedad, por lo que se necesita ayuda financiera para todos los gastos que se están generando. Todo suma”, decía la publicación compartida a finales de marzo.
La comunidad artística y sus seguidores no tardaron en responder con mensajes de solidaridad y aportes a través de plataformas digitales.
Manuel Masalva despertó del coma tras contraer una bacteria
Fue hasta mayo cuando se conoció que el actor había despertado del coma, aunque su condición seguía siendo delicada. Poco se supo en ese momento sobre su evolución, hasta que este 7 de julio Masalva reapareció públicamente con una emotiva publicación en su cuenta de Instagram, donde compartió por primera vez su experiencia.
“Estoy sanando. Quiero agradecer profundamente el apoyo que me dieron y me siguen dando, en todos los sentidos, a cada uno de ustedes. Creo más que nunca que la unión hace la fuerza”, escribió en el inicio de su mensaje.
Luego, el actor relató con palabras cargadas de emoción y espiritualidad los días más difíciles de su vida:
“Esto apenas comenzó, aún falta mucho, pero me siento bendecido, fuerte, renacido y acompañado. Dios nos ha dado una nueva oportunidad de vida; Dios me ha dado una nueva vida. 105 días, hoy, pero estoy despierto y llueve la luz desde entonces. 81 hasta tomar aire del exterior, de la entrada y salida de miles de personas en este grandioso hospital. Qué lugar. He vuelto a nacer aquí, en otra cultura que nos ha sobrepasado en el amor y la espiritualidad”.
El actor también expresó una profunda gratitud a quienes lo han acompañado en este proceso, desde su familia hasta el personal médico que ha estado a su lado durante todo este tiempo:
“No sé si realmente entiendo todo esto o solo una parte, ha sido eterno y falta aún. Solamente doy las gracias más fuertes que haya dado, a Dios y a mi familia, doctores y a todas esas personas que me han apoyado en todo desde el comienzo de este proceso. Les debo la vida. Sin ustedes y la mano de Dios, esto no fuese real”.
La publicación, que superó los 6.500 likes en pocas horas, fue inundada de mensajes de amor y ánimo.
“Ahora eres un testimonio de vida. Dios te acompaña”, “Eres un guerrero, Manuel. Toda la salud del mundo para ti”, “Saber que hoy estás bien nos llena a todos el corazón” y “Sigue con esa fuerza de guerrero”, fueron algunos de los comentarios que dejaron amigos y fanáticos.
¿Quién es Manuel Masalva?
Masalva ha construido una sólida carrera en cine, televisión y teatro. Además de su destacado papel en Narcos: México, participó en exitosas producciones como La Guzmán, La Rosa de Guadalupe, Mi corazón es tuyo y la reciente serie Tengo que morir todas las noches.
Su talento, versatilidad y carisma lo han convertido en una de las figuras más queridas del entretenimiento mexicano.
Hoy, su historia no solo conmueve por el drama vivido, sino que se transforma en un testimonio de fe, resistencia y gratitud. Lea: Actor mexicano despertó del coma tras grave infección en Dubái
Desde su cama de hospital, en un país lejano, Manuel Masalva vuelve a escribir su historia, esta vez como un sobreviviente que vio de cerca la muerte y decidió aferrarse a la vida.