La periodista Laura Hincapié vivió una inesperada situación al ser víctima de una retención forzada durante una visita a una supuesta veterinaria en Cali. La periodista se encontraba haciendo reportería para Séptimo Día, el emblemático programa dominical de Caracol Televisión,
El hecho, que en diciembre del 2024 generó preocupación en el equipo del canal, volvió a ser tema de conversación recientemente en el pódcast Presunta pola, donde la periodista relató en detalle la experiencia que calificó como una de las más difíciles de su carrera. Lea también: Diego Guauque regresa a la televisión con un reportaje sobre Cartagena
Periodista de Séptimo Día fue “secuestrada”
“Encerrada a las 8 de la noche en Cali, en contra de mi voluntad, fue algo que jamás imaginé enfrentar en mi trabajo”, confesó durante el pódcast. La reportera explicó que llegó al lugar junto a su equipo con el objetivo de verificar ciertas denuncias sobre el supuesto centro veterinario. El lugar, aunque abierto al público, terminó siendo una trampa.
A pesar de presentarse de manera formal y respetuosa como periodista, lo que ocurrió después fue completamente inesperado. Según su testimonio, un hombre —quien sería el supuesto veterinario— comenzó a agredir el equipo de grabación, golpeando en repetidas ocasiones la cámara mientras elevaba el tono de voz. Lea también: El periodista de Caracol al que amenazaron con revólver y cuchillo
“Estoy en contra de mi voluntad, entonces esto es un secuestro simple”, expresó Hincapié, recordando que incluso en ese momento había una clienta con una perrita en espera de atención. El ambiente se tornó cada vez más hostil, y la tensión alcanzó su punto máximo cuando los trabajadores fueron obligados a borrar las grabaciones.
“Usted me hace el favor y me pasa lo que tiene ahí grabado”, se escucha decir a una de las mujeres presentes en el lugar, en uno de los registros de audio que circularon tras el incidente.
Ante el riesgo, la periodista decidió poner fin a la visita de forma abrupta. “¡Vámonos, vámonos!”, gritó a su equipo mientras abandonaban el establecimiento, priorizando su integridad.