En una ceremonia digna de una película romántica de Hollywood, este sábado Barranquilla fue la sede de uno de los matrimonios más mediáticos de los últimos años: el futbolista más amado por Colombia en la actualidad, Luis Fernando Díaz Marulanda, y el de su esposa Geraldine Ponce.
Con casi 10 años de relación, la pareja fue protagonista de un matrimonio que recordarán ellos por años venideros junto a sus seres queridos. Familiares, amigos, estrellas del mundo de la farándula y el deporte estuvieron presentes en el gran evento que estaba en boca de todos en la ciudad.
Desde las 6 de la tarde, Barranquilla estuvo pendiente a lo que sucedió en la Parroquia de la Inmaculada Concepción, uno de los templos más emblemáticos de la ciudad y lugar del matrimonio de la pareja. Lea aquí: Dieron el sí: se conocen las primeras imágenes del matrimonio de Lucho Díaz
Después de la ceremonia religiosa, la pareja y los invitados estuvieron en la recepción en el Country Club, lugar de reunión de las personalidades de la alta sociedad barranquillera.
Como si se tratara de un sueño, Luis Díaz caminó junto a Geraldine Ponce, el amor de su vida, al altar para finalmente dar el ‘Sí’ que consolidó tantos años de romance en lo que será ahora una de las parejas más respetables y admirables del país.
Pero, ¿sabía usted que esta historia es el perfecto ejemplo de: Me casé con el amor de mi vida? Así comenzó el amor entre Geraldine y ‘Lucho’.
Una historia de amor de hace muchos años
El romance entre Geraldine Ponce y Luis Díaz inició en 2016, cuando el jugador tenía 19 años y ella 17. Gera, como le dicen los más cercanos, ha estado presente en la vida de ‘Lucho’ en cada momento de alegría y tristeza, desde que el querido futbolista trataba de dar un paso al profesionalismo en el Junior de Barranquilla. Desde entonces, no se han separado, y su relación ha dado fruto en forma de una familia con dos hijas.
A medida que el jugador fue creciendo, el amor de ambos lo fue haciendo consigo, ambos saltaron de las calles de Barranquilla al viejo continente, donde Geraldine fue un gran soporte para el jugador, y viceversa, ya que ambos se habían alejado del mundo que siempre habían conocido. El compromiso de ambos, paso de ser eso, ha convertirse en un proyecto de vida en suelo europeo. Le puede interesar: Estos son los lujosos detalles de la boda de Lucho Díaz hoy en Barranquilla
Desde ese entonces, la pareja ha optado por mantener su vida privada con bajo perfil. Aunque Geraldine suele ser activa en redes sociales, lo que comparte son principalmente momentos especiales con su esposo e hijas. Poco se sabe de su vida diaria, y en estos casi diez años de relación, han logrado mantenerse al margen de los rumores y el foco mediático.
Por su parte, Luis Díaz, en varias ocasiones, ha expresado que sus logros en el ámbito profesional están dedicados a su familia, especialmente a Geraldine y sus hijas.
Todo esto hace ver que lo bonito de la vida es que a veces las historias de amor sí existen y para eso se tiene el ejemplo de una pareja que comenzó a escribir su destino desde muy temprana edad, y que tras 9 años de relación, lograron llevar ese aprecio por el otro al altar.
