La nueva versión de ‘Nuevo Rico, Nuevo Pobre’, transmitida por Caracol Televisión desde febrero, llegó a su desenlace este miércoles en medio de emociones fuertes, revelaciones inesperadas y un cierre que apeló a los valores más humanos.
Protagonizada por Variel Sánchez, Lina Tejeiro, Juan Manuel Guilera y Laura Barjum, la producción mantuvo la esencia de la historia original emitida en 2007, adaptándola a una nueva generación de televidentes que acompañaron cada episodio con gran fidelidad.
El episodio final presentó un giro impactante en el destino de Brayan Galindo, quien, tras llegar a lo más alto como presidente de CartSmart, es víctima de un sabotaje provocado por Mateo, uno de los antagonistas de la historia. El atentado lo deja amnésico y desaparecido, mientras el caos se apodera de su entorno familiar y empresarial. Lea también: Lina Tejeiro reveló la millonaria suma que ganaba a los 9 años
Durante su ausencia, Andrés Ferreira, quien había sido separado de su cargo injustamente, regresa con la intención de recuperar la vida que alguna vez compartió con Brayan. Sin embargo, el reencuentro no resulta como esperaba: Brayan, aún sin recordar su pasado, le ofrece un empleo menor en la compañía, lo que Andrés rechaza con dignidad.
Así fue el final de ‘Nuevo rico, nuevo pobre’
El capítulo también resolvió los conflictos secundarios que habían alimentado la tensión narrativa, como las intrigas de Fernanda Sanmiguel y Mateo por controlar la empresa, y el rol decisivo de Rosmery, quien demostró su lealtad hasta el final. Lea también: ¿Nuevo amor? Lina Tejeiro y Felipe Saruma captados en romántica cena en Bogotá
Como broche de oro, la producción cerró con una inusual pero emotiva boda cuádruple: Brayan e Ingrid, Andrés y Rosmery, Leonidas y Antonia, y Fidel con Liseth celebraron el amor tras superar los obstáculos. El mensaje final estuvo orientado a que por encima del poder y el dinero, lo que realmente transforma la vida es el amor sincero y las segundas oportunidades.
Con este cierre, Nuevo Rico, Nuevo Pobre reafirma su lugar en la memoria de los colombianos como una historia que, a pesar del paso del tiempo, sigue conectando con las emociones del público.