El sentimiento de tristeza embarga a la familia de Sábados Felices, uno de los programas insignia de la televisión colombiana de Caracol Televisión. En la noche del lunes 10 de marzo, se conoció la noticia del fallecimiento de Jairo Susa Lizarazo, libretista, periodista e investigador, quien hizo parte del programa por más de tres décadas.
Su deceso fue confirmado a través de redes sociales por sus compañeros de set, quienes lo despidieron con sentidos mensajes. Uno de los primeros en dar a conocer la noticia fue César Corredor, humorista del programa, quien publicó en sus redes sociales. Lea: Recuerdos de La Gorda Fabiola: 10 humoristas de Sábados Felices que ya no están
“Hoy despedimos con gran tristeza a un gran compañero libretista de nuestro programa Sábados Felices, el gran Jairo Susa, quien escribió varias secciones con gran éxito y acierto. Entre ellas, las de Barbarita, que se notaban cuando él las escribía, pues eran épocas en las que se podían hacer sketches largos. Descansa en paz, Jairito. QEPD. Fortaleza para tu familia y que Dios les dé alivio a sus corazones”, escribió en su cuenta de Instagram.
¿Quién era Jairo Susa?
El libretista hizo parte de la familia de Sábados Felices desde 1986 hasta 2022. Sin embargo, su labor no se limitó a este programa, pues también se desempeñó como periodista, caricaturista e investigador. Su presencia en el humor y la historia de Colombia perdura en la memoria de muchos. Lea: Video: Sábados Felices rinde homenaje a La Gorda Fabiola
Jairo Susa Lizarazo se une ahora al grupo de humoristas que dejaron un gran legado y una profunda huella en la televisión colombiana. Marcelino Rodríguez Mandíbula, Enrique Colavizza, Carlos Mocho Sánchez y Fabiola Posada La Gorda son algunos de los reconocidos artistas que han fallecido en los últimos años.
El humorista Piter Albeiro también le dedicó una emotiva despedida en Instagram. Lea: Así fue el show de Shakira en Sábados Felices hace más de 30 años
“Cuando un amigo se va, se lleva algo de nosotros. Jairiyo Susa estuvo presente en uno de los momentos más importantes de mi vida. De su mano y ayuda recorrí gran parte de mi país. Nunca dudaba de que yo pudiera hacer algo, por más difícil que pareciera. Algo me decía que ya Dios lo había llamado y nos pudimos dar ese abrazo que él sabía que sería el último. Amen, perdonen, pero nunca olviden. Hay amigos como él que serán imposibles de olvidar. Hasta siempre, amigo mío. Ahora te tienen afortunados en el cielo.”