La terapeuta y presentadora brasileña Flavia Dos Santos atraviesa un difícil momento tras ser víctima de un robo en su residencia en Bogotá. La también conferencista y sexóloga denunció públicamente los hechos a través de sus redes sociales, donde manifestó su indignación por la vulnerabilidad en la seguridad del edificio donde vive.
“Acabamos de aterrizar, aún no estamos en mi casa, pero ya tuve la gran noticia por la señora que trabaja conmigo que entraron a mi apartamento y me robaron todo”, relató Dos Santos mediante una historia de Instagram. La presentadora regresaba a Colombia tras pasar las festividades en Brasil cuando recibió la alarmante noticia. En su mensaje, adelantó que se dirigía a su vivienda para evaluar los daños. Lea también: Flavia Dos Santos enfrenta uno de sus mayores temores
En entrevista con RCN Radio, Dos Santos compartió detalles adicionales sobre el robo. Según sus declaraciones, los delincuentes recorrieron meticulosamente cada rincón de su hogar en busca de objetos de valor. Sin embargo, uno de los aspectos más preocupantes del incidente fue la falla en las medidas de seguridad del edificio. “Entraron en mi apartamento, cerraron la puerta y salieron por la puerta. Las cámaras de seguridad no estaban funcionando, apagadas durante dos días, fue eso lo que la Policía averiguó”, explicó la terapeuta, quien también confirmó que el caso está siendo investigado por las autoridades.
Entre los objetos robados, Dos Santos destacó pertenencias de gran valor sentimental, como los dientes de leche de sus hijos que guardaba en una cajita. “Se lo llevaron, no sé qué van a hacer con dientes de leche. Me robaron un perfume que yo adoro y que fue el pago de una conferencia, cosas personales, algo de valor”, declaró. La terapeuta lamentó la pérdida de estos artículos, que tenían un significado especial en su vida. Lea también: Siempre será un placer hablar con Flavia
A través de su cuenta oficial de Instagram, Dos Santos también reflexionó sobre la sensación de inseguridad que vive actualmente en Colombia. “Hace 19 años tomamos la decisión de vivir acá. Nos encanta la vida en Colombia, nos encantaba la seguridad. Como era menos peligroso que Río de Janeiro, nos decidimos quedar, pero eso ha cambiado. Es una sensación de abandono”, expresó.