La historia de amor entre el príncipe Harry y Meghan Markle, duques de Sussex, ha sido objeto de intensa atención mediática desde su inicio. Sin embargo, según fuentes cercanas a la familia real, su relación ha comenzado a mostrar signos de distanciamiento.
Para alejarse de la presión mediática, la pareja ha decidido mantener bajo perfil, pero esto no ha evitado que su matrimonio enfrente diversas dificultades. En sus apariciones públicas, han mostrado una distancia notable, lo que ha generado especulaciones sobre su relación. Lea también: El príncipe Harry y Meghan Markle se despiden bailando salsa
Recientemente, la revista americana Heat reveló que la pareja lleva vidas separadas, por lo que cada uno tiene el cumpliendo sus obligaciones de manera independiente y sin compartir algunas comodidades, esto ha generado preocupación sobre el futuro de su matrimonio.
Un acuerdo reciente tratado que tiene la pareja real se establece que el príncipe Harry viajará a Reino Unido cada dos meses para mantener su conexión con su familia: “Hemos estado trabajando para que Harry vaya a Reino Unido y esté cerca de su núcleo de su cultura y origines ”, expresó un informador de la realeza. Lea también: Los looks del príncipe Harry y Meghan Markle a su llegada a La Boquilla
Sin embargo, Meghan Markle no tiene planes de regresar a Reino Unido ya la actriz habría trabajado en su paz mental y no querría que su familia estuviera vinculada a las responsabilidades reales, considerándolas muy “difíciles de asumir”.
La separación geográfica y la presión social habrían generado ciertas molestias en Meghan, quien apoya la decisión de Harry pero se sentiría incómoda con su ausencia prolongada. “Al final, Harry va a vivir una vida bastante a tiempo parcial entre los dos países, esto le está generando mucha ansiedad a Meghan”, expresó una fuente cercana. Lea también: Príncipe Harry y Meghan de Sussex: así fue el encuentro en La Boquilla