Christina Aguilera es una de las cantantes pop más destacadas de los 2000’ que se mantiene sobre los escenarios, dando de que hablar por su capacidad vocal y musical, así como por su drástico cambio físico.
Su presentación fue un derroche de sensualidad y música. La artista lució orgullosa su nuevo cuerpo, después de perder 18 kilos en los últimos meses, gracias a su disciplina, una dieta sana y equilibrada y una rutina de ejercicios que sigue con rigurosidad. Lea aquí: ¡Oficial! Britney Spears se despide de su carrera musical
La intérprete de ‘Ain’t no other man’, ‘Dirty o Beautiful’ contó hace años a la revista Helth que odiaba ser superdelgada y que había aprendido a aceptar sus nuevas curvas, pero todo cambió a sus 43 años, puesto que volvió al físico que lucia a finales de los años 90.
El primer cambio radical que tuvo su cuerpo fue cuando nació su hijo Max en 2008 y recibió duras críticas por su aumento de peso; aunque dos años después, cuando grabó Burlesque (2010) volvió a la figura que el mundo conoció y la volvió a perder tras el divorcio con el compositor musical Jordan Bratman. Lea aquí: Bill Clinton y Michael Jackson: primeros mencionados en el caso Jeffrey Epstein

Aguilera se recuperó del corazón y se comprometió con Matthew Rutler y en 2014 le dio la bienvenida a su hija Summer. La artista no solo sorprendió con su nueva experiencia en la maternidad, sino con la perdida de más de 20 kilos, debido a una ingesta diaria de 1600 calorías y siguiendo la Dieta Arcoíris.
En la actualidad, la cantante no se somete a ninguna dieta milagrosa, sino que sigue un régimen rico en verduras y frutas, consume alimentos integrales y menos azúcar. Además, practica yoga, boxeo, entrenamientos de fuerza y cardiovasculares, dos a cinco veces por semana.
