Nació como niño, pero luego de una larga transformación le dio paso a su feminidad y ahora es reconocida como Mimi Tao, una joven destacada en su país por su carrera de modelo.
Hace solo una década estudiaba para convertirse en monje budista, y luego de vivir seis años en un templo empezó a indagarse sobre su verdadera identidad lo que le hizo sentir cada vez más deseos de convertirse en mujer.
"Llegó un momento en que ya no podía ocultar mis sentimientos femeninos, pero no quise decir nada porque sabía que la sociedad tailandesa no aceptaba abiertamente al tercer sexo, especialmente si se trataba de un monje", aseguró Mimi Tao.
Entonces, fue así como decidió dar rienda suelta a su deseo, aunque a escondidas, empezó a maquillarse y a tomar anticonceptivos, que hicieron que le crecieran los senos.
Debido a las dificultades económicas por las que estaba pasando su familia, salió del templo y empezó a buscar trabajo para ayudarlos. Fue así como inició su carrera, modelando ropa interior para diferentes marcas en Singapur.
Hoy a pesar de las críticas, es reconocida en su país y goza del apoyo de su madre.
"Mi mamá me dice ahora que está orgullosa de mí. Cuando salimos juntas ella me presenta diciendo, 'ésta es mi hija, es modelo y es famosa'. Ser aceptada por mi familia me da mucha fuerza. Si somos aceptadas por nuestras familias, entonces nos aceptará también la sociedad, el país y el mundo", indicó.



