Por tratarse de una de las enfermedades más comunes y devastadoras en una mujer, el cáncer de mama no sólo requiere de los tratamientos médicos según su grado de complejidad, a estos se debe sumar el apoyo emocional, que será necesario para enfrentar los desafíos con valor y esperanza.
El diagnóstico puede resultar abrumador, y en su tránsito generar una montaña rusa de emociones que van desde el miedo y la ansiedad, hasta la tristeza y la incertidumbre, y en ese contexto el apoyo emocional cumple un papel crucial.
“En la mayoría de países, se cumple un protocolo o reglamentación desde el diagnóstico, que consiste en proveer a la paciente de una cita con psico-oncología, y aunque hay pocos especialistas, en Colombia la remisión es con psicólogos que pueden abordar el tema”, explica la doctora Silvina Elías, especialista en mastología y oncoplástia.
Resulta muy común que en algunos casos se desestime la importancia de la salud mental y emocional de la paciente, por lo que la profesional insiste en promover esa consulta, incluso para la familia, teniendo como base que nadie está exento de este tipo de problemas, y menos ante la certeza de un nuevo padecimiento.
“Todos tenemos recursos suficientes para vivir el día a día para estar normal, sin embargo, nadie los tiene para recibir el impacto de un diagnóstico que desequilibra a la persona, a su pareja, su familia y les predispone a padecerlo en distinta forma y medida, siendo el momento para recibir apoyo. La sensación de temor que genera el cáncer, se compara con el que produce la muerte”, agrega. También le podría interesar: Señales para detectar a tiempo el cáncer de colon y recto
Acompañamiento inmediato
Así como se activa una red médica para atender el caso una vez conocido el dictamen, las citas con psicología deben programarse inmediatamente, obviamente, en la vorágine de completar estudios e iniciar el tratamiento puede quedar un poco relegado este aspecto y tanto la paciente como su acompañante deben lidiar solos con las emociones que se experimentan.
Es sabido que sumado al temor y ansiedad, aparece la ira, la tristeza y en ocasiones la culpa, porque el interrogante de qué se pudo haber hecho, es inevitable, entonces la consulta puede amainar un poco en un instante en el que inevitablemente se prioriza la recuperación física.
Lo anterior ratifica que la cita con psicología debe ser estipulada por todos los sistemas de salud desde el inicio, toda vez que tiene igual importancia como las atenciones en oncología, mastología, nutrición, entre otras que componen el tratamiento integral.
La psico-oncología es una ayuda al diagnosticar todo lo que va sucediendo. Inicialmente apoya en el manejo del estrés y la ansiedad que todos los tratamientos desconocidos generan, incluso el riesgo latente de perder la vida.
Luego, se convierte en el apoyo emocional durante el tratamiento al paciente y sus cuidadores y al finalizar éste, es común que se hayan producido cambios o secuelas que pueden ser físicas, mentales, que muchas veces van ligados a la droga que se usó. En este caso la depresión es muy común.
La doctora Silvina Elías es contundente en afirmar que la posición que adopte el paciente es fundamental en su curación y afirma que el optimismo cura, mientras que el pesimismo no tiene buen pronóstico, sin importar cuál es el diagnóstico.
Si bien la consulta psicológica debe ser permanente, la paciente debe contar con un familiar como acompañante, porque ese estrés que transita entre el diagnóstico y la incertidumbre, requiere que alguien más conozca de primera mano lo que está sucediendo, eso es lo que se denomina “red de apoyo”. Lea también: Enfermedades cardíacas: en aumento y cada vez más prematuras.