Desde mediados de marzo pasado, cuando se comenzaron a reportar los primeros casos de COVID-19 en el país y el contexto internacional advertía una inminente cuarentena nacional, la Superintendencia Financiera de Colombia emitió diversas directrices para apoyar a los deudores de la banca y evitar un colapso financiero.
La Superfinanciera ordenó a las entidades bancarias conceder períodos de gracia a los créditos de vivienda, que al 29 de febrero no presentaran más de 60 días de mora y sin afectar la calificación de riesgos del titular.
Además, el Ministerio de Vivienda anunció que el incumplimiento en las cuotas no sería causal de suspensión de los subsidios de vivienda de interés social , siempre y cuando los morosos se acogieran a los períodos de gracia.
Las medidas del Gobierno llegaron como ‘anillo al dedo’ para las familias colombianas que en un 84 % afirmaron que la pandemia afectó sus ingresos y que estos se vieron reducidos en $976 mil, de acuerdo con una encuesta de Transunion, compañía que realiza estudios económicos.
Las cifras
A corte de mayo pasado, 9,8 millones de deudores se acogieron a los períodos de gracia de dos, tres y hasta seis meses, lo que incluye aplazar el pago de la cuota al capital y los intereses o los seguros, permitiendo que el monto no cancelado se redistribuya a futuro y de acuerdo con la capacidad de pago del cliente, según información de la Asociación Bancaria y de Entidades Financieras de Colombia (Asobancaria).
Para el caso del leasing habitacional se ha ampliado el plazo de financiación a un máximo de 30 años o, al igual que con los créditos hipotecarios, han aplazado las cuotas hasta por seis meses.
Las cifras de Asobancaria indican que la cartera de créditos de vivienda beneficiados suma $45,9 billones y de estos, aproximadamente, el 25 % corresponden a créditos hipotecarios VIS ($11,3 billones); 54 % a créditos hipotecarios No VIS ($24,6 billones) y el 21 % restante a leasing habitacional ($9,9 billones).
Pese a la emergencia ocasionada por el COVID-19 y a la recesión económica, el desembolso de créditos de vivienda no ha parado. La Superfinanciera reportó que del 20 de junio al 26 de junio de 2020 se desembolsaron $68.377 millones en 1.223 créditos para vivienda VIS y $183.749 millones en 1.096 créditos en el segmento No VIS.
Grave afectación
Aunque el 2020 se proyectaba como un año positivo para la construcción, especialmente para el segmento edificador, la emergencia no prevista por el coronavirus ‘echó por tierra’ el buen panorama. Así lo revela el Informe Trimestral de Vivienda de Asobancaria.
“En el primer trimestre de 2020, el PIB de la construcción presentó una reducción de -9,2 %, lo que señala una fuerte contracción, toda vez que en el primer trimestre del 2019 fue inferior en 3,7 puntos porcentuales (-5,5 %). Entre enero y marzo de 2020, este sector fue el de mayor contracción entre todas las actividades económicas (-9,2 %), comportamiento explicado por las pronunciadas desaceleraciones”, señala la publicación.
El informe de Asobancaria también demuestra cifras de afectación de la actividad de construcción, citando al DANE, en las que se muestra la contracción en los despachos de cemento en -5,7 % en marzo de este año y la reducción de la producción de concreto en -18,9 % en el mismo mes. “Los encadenamientos y el papel dinamizador del sector serán claves a la hora de recuperar la senda de crecimiento económico y el empleo de miles de colombianos”, puntualiza la entidad.