El mayor desafío de la industria molinera de Colombia hoy tiene que ver con los precios de los commodities a nivel internacional, asegura el presidente de la Andi, Bruce Mac Master.
El dirigente, que asiste en Cartagena al máximo encuentro de los molineros de la región, ALIM 2025, en el Centro de Convenciones del Hotel Las Américas, indicó que “se prevé que además van a haber unos incrementos importantes en demanda en los próximos años. También hay una competencia muy grande entre los productos que van para el consumo humano y los que van para los alimentos concentrados o balanceados para los animales de las industrias pecuaria y avícola. Vemos una tendencia muy grande de concentrar en esa otra industria -la materia prima-, lo que se denomina industria de proteínas, y que sin duda nos genera unos retos importantes”. (Lea aquí: Andi y el salario mínimo para 2026: “Tenemos un reto inmenso y compartido”).
Dos retos adicionales, no menores, los identifica la directora de la Cámara Fedemol de la Andi, Pilar Ortiz, y tienen que ver con las limitaciones para tener la materia prima, que es el trigo, toda vez que en Colombia no se tienen las condiciones geográficas ni climáticas para sembrar trigo, y por ello se debe importar el 99,9% de ese producto. El cuarto desafío es que la población colombiana empieza a tener más adultos mayores, que consumen menos harina de trigo.
La Cámara Fedemol, presente
La Cámara Fedemol de la Andi tiene afiliadas a las 20 empresas molineras de trigo que hay en Colombia y que producen harina de trigo en 40 plantas de producción, y esa harina de trigo es la que utilizamos diariamente en Colombia en los hogares o las empresas, para hacer productos de panadería, galletería, pastelería y las pastas comestibles, dijo la dirigente.
En Colombia se producen anualmente 1,3 millones de toneladas de harina de trigo, de las cuales el 70% se va al sector de panadería, el 20% para galletería y el 10% para el sector de pastas comestibles.
El mayor consumo está en Cundinamarca y Boyacá que es una región consumidora de pan; y en la Costa Caribe, que consumen más harina para hacer preparaciones en casa.
En Colombia hay un consumo per cápita anual de 23 kilogramos de pan, que se ha mantenido en los últimos años; mientras que en el sector de galletería y pastas, esta última ha venido creciendo al 30% en los dos últimos años. (Lea aquí: Conoce cuál es el primer departamento importador de la Costa Caribe).