El dólar sube el jueves frente a sus principales pares, mientras los operadores esperaban la publicación retrasada de los datos de inflación al consumo de Estados Unidos del viernes, al tiempo que digerían las amenazas comerciales entre Washington y Pekín.
Pese a que la divisa abrió la jornada al alza, revirtió tendencia, minutos después revirtió comportamiento cotizó a $3.897, lo que representó un descenso de $3,82 frente a la Tasa Representativa del Mercado, TRM, que para hoy se ubicó en $3.900,82. Además, la moneda registró un precio mínimo de $3.908 y un máximo de $3.910 con 6 transacciones por un monto de US$1,5 millones.
El yen se debilitaba hasta mínimos de una semana atrás, mientras el mercado aguardaba los detalles del plan de estímulo de la nueva primera ministra, Sanae Takaichi, a la que se considera partidaria de una relajación fiscal y monetaria.
Reuters dijo que libra esterlina permanecía bajo presión después de que los datos del miércoles mostraran que la inflación al consumo en Reino Unido seguía estable en 3,8% el mes pasado, desafiando las estimaciones de los economistas de que se aceleraría.
Los operadores se apresuraron a situar en 75% las probabilidades de que el Banco de Inglaterra reduzca los tipos de interés en su reunión de diciembre, lo que supone un fuerte aumento respecto a 46% de probabilidad anterior a la publicación de los datos, aunque esas probabilidades habían vuelto a bajar hasta aproximadamente 61% el jueves. El índice del dólar, que mide la divisa frente al yen, la libra esterlina, el euro y otros tres pares, subía 0,11%, hasta 99,038.
Tensiones comerciales siguen siendo motor de volatilidad de los mercados
El Gobierno de Trump está considerando la posibilidad de frenar una amplia gama de exportaciones de software a China, desde ordenadores portátiles a motores de reacción, como represalia contra la última ronda de restricciones a la exportación de tierras raras de Pekín, según informó Reuters el miércoles.
Según Reuters, la reacción del mercado de divisas, sin embargo, ha sido en gran medida optimista, con refugios tradicionales como el yen y el franco suizo encontrando poco apoyo, mientras que el oro continuaba su retroceso desde máximos históricos.
“Las tensiones comerciales siguen siendo el motor de la volatilidad en los mercados, pero, se puede afirmar con rotundidad que los agentes del mercado esperan que estas amenazas no se materialicen en acciones”, afirmó Kyle Rodda, analista jefe de mercados financieros de Capital.com.
“Se consideran maniobras arriesgadas y formas de impulsar las negociaciones.”
Mientras tanto, la escasez de datos macroeconómicos oficiales en Estados Unidos continuó con el cierre de la Administración, a punto de entrar en su vigésimo tercer día, aunque el índice de precios al consumo, IPC, se publicará el viernes, con más de una semana de retraso. Otros datos, como las nóminas mensuales, no se han publicado.
“Los mercados están marcando el tiempo. No hay muchas noticias fiables”, afirmó Gavin Friend, estratega de National Australia Bank.
E incluso el informe del IPC “casi se está pasando por alto”, porque independientemente de lo que muestre, “todo el mundo piensa que la Fed va a recortar la próxima semana y probablemente de nuevo en diciembre”, dijo Friend.
Reuters dijo que las probabilidades implícitas en el mercado de un recorte de los tipos de interés de la Reserva Federal de un cuarto de punto se sitúan en 97% para el 29 de octubre. En total, se prevén reducciones de 48,5 puntos básicos en lo que queda de año.

