Siete meses de parálisis completó el proyecto de ampliación y modernización del Aeropuerto Internacional Rafael Núñez de Cartagena por la falta de consensos con sectores comunitarios del área de influencia del terminal aéreo y la demora en la entrega de permisos y algunos estudios.
Las obras deberían haber empezado el 1 de marzo de este año, pero “aún no comienzan porque han tenido que darse mesas de trabajo con la comunidad, sortear una acción de tutela por parte de la comunidad de La Boquilla, que pedía consulta previa, la cual les fue negada. Hoy estamos pendiente de una acción ambiental que debemos cumplir para complementar una información que requiere la ANLA (Agencia Nacional de Licencias Ambientales). Una vez ello se de podemos arrancar con todas las obras”, dijo Carlos Cuartas, gerente de la concesión Oinac, operador del aeropuerto Rafael Núñez. (Lea aquí: Las 5 pesadillas de transportadores de carga por carretera en Colombia).
Aquí tiene que primar el interés colectivo sobre cualquier interés individual. El proyecto tiene que seguir adelante y seguramente no estarán el 100% de los interesados de acuerdo en ese camino, pero tendrá que hacerse. La ciudad no se puede dar el lujo de que este proyecto entre en liquidación y no se ejecute":
Juan Camilo Oliveros, director ejecutivo del Consejo Gremial de Bolívar.
Claramente no se pueden iniciar las obras. Debemos ser conciliadores y respetuosos de las normas y de las comunidades, pero igualmente requerimos de garantías para acometer nuestro trabajo.Si eso no pasa se pone en riesgo claramente el proyecto”:
Carlos Cuartas, gerente concesión Oinac.
Igualmente, están pendiente una autorización del Distrito para usar la vía entre el aeropuerto y el lote o manzana 554, que va hacia la Aviación Naval. “Apenas la Alcaldía lo autorice hacemos las obras”, explicó el ejecutivo de Oinac.
Además, está pendiente un decreto para el tema de los taxistas en el aeropuerto; mientras que también hay interés de un par de propietarios de viviendas en Crespo en que se les compren sus inmuebles, pero estos predios no están incluidos en el área del proyecto. La decisión de compra solo la podría autorizar la ANI, no la concesión, trascendió.
Cuartas recordó que a la fecha se han realizado 63 mesas de trabajo con el acompañamiento de la Personería, Procuraduría y todos los entes encargados de vigilar que los procesos se lleven a cabo con toda la normalidad y legalidad, para socializar el proyecto y dijo que no se puede parar el progreso y el beneficio que un aeropuerto como este le genera a todos los cartageneros, que de alguna manera viven del turismo. El beneficio es infinito, dijo. “El proyecto está más que explicado y cumplimos a cabalidad con todos los procesos para iniciar las obras”, precisó Cuartas.
No obstante, dijo que si no se llega a un consenso con las comunidades “claramente no se pueden iniciar las obras. Debemos ser conciliadores y respetuosos de las normas y de las comunidades, pero igualmente requerimos de garantías para acometer nuestro trabajo.Si eso no pasa se pone en riesgo claramente el proyecto”.
Cuartas añadió que “los contratos de concesión tienen unas fechas de inicio y una fecha de terminación. Nosotros estamos aquí por 8,5 años, estaríamos máximo hasta septiembre de 2032, ni un día más, ni un día menos. Para ello requerimos que el proyecto lleve a cabo las diferentes fases. Si se sigue desplazando, claramente puede afectar el proyecto y la rentabilidad del mismo. Si eso llega a suceder, se pone en riesgo la ampliación del aeropuerto”.
Para la ampliación del aeropuerto, a la fecha ya se cuenta con 40 predios privados adquiridos (100% avaluados) y 30 ofertados (75%), de los cuales cerca del 80% ya aceptaron la propuesta.
Preocupaciones comunitarias en torno al proyecto
“Hay unas obras que se van a acometer en la Manzana 554, en donde se tiene presupuestado la instalación de unos dispensadores de combustibles para el suministro de los aviones y otros equipos. Esto venía siendo manejado a través de unos tanques -de almacenamiento- a donde iban los carros cisternas y luego estos se acercaban a los aviones. Hoy piensan colocar los dispensadores en la Manzana 554 convirtiendo esa zona y el barrio en una zona de riesgo altísimo por una -eventual- conflagración que se pueda presentar allí. No existe un estudio de riesgo que determine que eso sí se puede instalar allí y que ellos - la concesión - no cuenten con otras áreas donde instalarlos, cuando cuentan con más de 20 hectáreas disponibles para colocar ese tipo de dispensadores en ese entorno”, aseguró Óscar Gaviria, un morador de Crespo presente en los actos inaugurales del nuevo sistema de control de acceso al aeropuerto.
Sobre esa preocupación, el gerente de la concesión Oinac, Carlos Cuartas, señaló que el proyecto de concesión comprende la construcción de un muelle internacional nuevo en el área donde hoy están los tanques de combustibles que se surten con 15 carrotanques diarios entrando al barrio Crespo. El proyecto prevé quitar los tanques de esa área y traslademos a la zona de la aviación privada, en el área oriental del aeropuerto, cerca a la ciénaga de La Virgen, lo que obliga a que los carrotanques ingresen al aeropuerto por la vía aledaña a La Bocana.
Con el nuevo muelle internacional, con 5 muelles de abordaje directo, se evitarían las incomodidades que sufren los viajeros al abordar y desembarcar en la plataforma del Rafael Núñez a la intemperie, bajo sol o lluvia, como sucedió este viernes 19 de agosto que llovió en la zona del aeropuerto.
El optimismo del Consejo Gremial de Bolívar
Juan Camilo Oliveros, director ejecutivo del Consejo Gremial de Bolívar, se refirió a la situación del proyecto de ampliación del Aeropuerto Rafael Núñez y dijo: “Estamos más optimistas que hace algunos meses. El proyecto debió haber empezado sus obras mayores en marzo. Hoy vemos una mayor sinergia entre la Alcaldía, la ANI y la concesión. Ya se entregó el Plan de Manejo del Tránsito al proyecto, pero faltan algunos aspectos técnicos que falta que la Alcaldía entregue y que se trabaja en ese sentido y hay unos elementos de la licencia ambiental que también se están trabajando y con estos elementos esperamos que antes de finalizar el año se puedan empezar las obras que necesita la ciudad en su aeropuerto. Es un proyecto de urgencia porque ya está estresada la infraestructura y que urgentemente necesitamos que se pueda acometer. Vemos un ambiente mejor que el que había hace unos meses atrás”, explicó el dirigente gremial.
Reconoció que se requiere un trabajo legal y técnico. Hay elementos legales que se deben hablar con diferentes actores para poder seguir adelante. Aquí tiene que primar el interés colectivo sobre cualquier interés individual. El proyecto tiene que seguir adelante y seguramente no estarán el 100% de los interesados de acuerdo en ese camino, pero tendrá que hacerse. La ciudad no se puede dar el lujo de que este proyecto entre en liquidación y no se ejecute".
La parálisis del proyecto y la mirada de la ANI
El presidente de la ANI, Óscar Javier Torres Yarzagaray, reconoció la existencia de escollos en el desarrollo del proyecto y señaló: “Hemos venido hablando con las comunidades del barrio Crespo, solucionando a través de mesas técnicas que se han desarrollado con el apoyo de la Cámara de Comercio de Cartagena. Hemos venido superando, aclarando y dando la información de los alcances de esta inversión en esta infraestructura y aclarando que no existe ninguna rivalidad con el nuevo aeropuerto que se piensa construir en Bayunca”.
El funcionario fue preguntado de si hay riesgo que por los retrasos del proyecto, la operación en el aeropuerto colapse y su respueta fue: “Ahora mismo no. Tenemos los cronogramas bastante ajustados, avanzamos con las comunidades y explicando que este aeropuerto que al estar concesionado también arroja una contraprestación aeroportuaria que recibe el Distrito de Cartagena. El último giro hecho a la Alcaldía fue de 172 mil millones de pesos que se convierten en ingresos corrientes de libre destinación y que pueden ser invertidos en el mejoramiento de las vías de acceso al aeropuerto”.
“Estamos esperando superar todos los temas sociales que tenemos con las comunidades para empezar las obras”, aseguró Óscar Javier Torres Yarzagaray, presidente de la ANI.
Inauguran nuevo sistema de control de acceso de pasajeros
La Operadora Internacional Aeropuerto de Cartagena, Oinac, inauguró ayer el nuevo sistema de control de acceso de pasajeros al muelle nacional del aeropuerto Rafael Núñez, el segundo de su tipo en el país, después del instalado en el Aeropuerto El Dorado, de Bogotá. Se invirtieron $1.000 millones, en una mejora que no hace parte del contrato de concesión. El mismo sistema también se instaló en el muelle internacional. El sistema automatiza el proceso y da mayor seguridad a la operación. Igualmente agiliza los accesos a las salas de espera. En total se instalarán 11 equipos.
Esta sería la nueva opción para volar entre Cartagena y Madrid
Los viajeros interesados en volar entre Cartagena y Madrid (España) podrían tener a partir de julio de 2026 una nueva opción tras el interés de la aerolínea española World2Fly de volar entre las dos ciudades. Esa compañía ya vuela a Cali. Carlos Cuartas, gerente de la Concesión Oinac, operador del aeropuerto Rafael Núñez, le confirmó a El Universal que representantes de la aerolínea española ya han hecho contactos con Oinac para esa eventual operación. Repotur.co señala que inicialmente sería una frecuencia semanal. Hasta hoy la única opción entre los dos destinos es Plus Ultra. (Lea aquí: ¿Qué debe hacer Colombia para reducir dependencia del gas importado?).