Este miércoles, el dólar abrió a la baja en Colombia y se negocia en promedio a $4.085, es decir, $13,83 por debajo de la Tasa Representativa del Mercado (TRM) del día, que se ubicó en $4.098,83. Durante las primeras horas de la jornada, se reportaron precios mínimos de $4.079 y máximos de $4.085.
El aumento de la tensión militar en Medio Oriente, con bombardeos de Israel sobre Irán durante seis días consecutivos, ha generado temores sobre una posible escalada. Israel ha expresado su intención de frenar la actividad nuclear iraní y ha llamado a un cambio de régimen en Teherán. Por su parte, Estados Unidos ha reforzado su presencia militar en la región, lo que ha incrementado la especulación sobre una posible intervención directa, según reportes de Reuters.
El líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Jamenei, rechazó el miércoles cualquier posibilidad de rendición, tras declaraciones del presidente estadounidense, Donald Trump, quien pidió una capitulación incondicional.
El dólar se mantiene como refugio, pero con movimientos mixtos
Pese a las tensiones, la cotización del dólar mostró movimientos mixtos. Aunque ha ganado cerca del 1% frente al yen japonés y al franco suizo desde el jueves anterior, este miércoles presentó ligeras bajas frente a estas monedas y retrocesos más marcados frente al euro y la libra esterlina.
“El dólar sigue siendo un refugio seguro por su profundidad y liquidez”, afirmó Rodrigo Catril, estratega de divisas del National Australia Bank, quien aclaró que si bien las condiciones estructurales debilitan parcialmente esta función, no la eliminan del todo.
Aun así, el índice que compara al dólar frente a una canasta de seis monedas principales muestra una pérdida acumulada de cerca del 8% en lo que va del año, debido a la pérdida de confianza en la economía estadounidense y en la credibilidad del gobierno de Trump como aliado comercial y diplomático.
El petróleo se estabiliza tras fuerte alza
Los precios del petróleo, que subieron un 4% en la sesión anterior, se mantienen estables mientras los mercados evalúan el impacto del conflicto sobre el suministro energético global. La posibilidad de interrupciones en la producción por la guerra entre Irán e Israel, y una eventual participación activa de EE. UU., siguen pesando sobre las proyecciones.