En las últimas horas, Coca-Cola presentó sus resultados financieros correspondientes al tercer trimestre de 2024, destacando un desempeño superior al esperado por los analistas.
La compañía logró reportar ingresos de 11.900 millones de dólares, una cifra que, aunque se mantuvo sin cambios interanuales, superó las previsiones de consenso, que situaban las expectativas en 11.600 millones de dólares. A pesar de estos sólidos resultados, las acciones de la empresa mostraron una tendencia a la baja desde las operaciones previas a la apertura del mercado.
El incremento de los ingresos también se vio reflejado en una mayor rentabilidad. Coca-Cola registró un beneficio por acción (BPA) de 0,77 dólares, lo que representa un crecimiento interanual del 4%, en contraste con las previsiones que apuntaban a que este indicador se mantendría estable en 0,74 dólares. Lea: El dólar alcanzó su precio más alto en este 2024: este es su precio
Asimismo, los ingresos orgánicos ajustados crecieron un 9% respecto al mismo período del año anterior, cifra que superó cómodamente las expectativas del mercado, que anticipaban un incremento del 6,3%.
Sin embargo, no todo fue positivo en el informe financiero. Un aspecto que ha generado preocupación entre los inversores es la disminución del volumen unitario, que cayó un 1% en comparación con el tercer trimestre de 2023.
Este dato contrasta con las proyecciones, que esperaban un crecimiento cercano al 0,4%, y con el crecimiento del 2% observado el año anterior. La compañía reportó caídas significativas en varias categorías clave, lo que podría explicar la reacción negativa del mercado ante estos resultados. Le puede interesar: Refinería de Cartagena anuncia plan para evitar nuevos apagones
Entre las categorías más afectadas se encuentran los segmentos de nutrición, jugos, bebidas lácteas y vegetales, que experimentaron una caída del volumen unitario del 3%. El segmento de agua, bebidas deportivas, café y té también registró una disminución, con un retroceso del 4% en su volumen de ventas.

A pesar de estas dificultades, el segmento de bebidas carbonatadas registró un ligero crecimiento en términos de volumen, aunque la dinámica fue menos favorable de lo que se anticipaba. El volumen unitario de las bebidas gaseosas cayó un 1%, frente a una estimación de crecimiento del 0,42%. Aunque el precio y la mezcla de productos aumentaron un 10% (superando la previsión del 6,51%), este aumento no logró compensar las caídas en otras áreas.
Coca-Cola ha decidido mantener sus previsiones financieras para todo el año 2024, proyectando un crecimiento del 5-6% en los beneficios ajustados por acción. No obstante, la compañía advirtió que un posible lastre en el impulso de crecimiento de los beneficios podría presentarse en el cuarto trimestre, principalmente debido a las fluctuaciones cambiarias y al impacto de las adquisiciones recientes. Lea también: Ecopetrol anuncia pago anticipado de su crédito con la banca internacional
Los analistas también señalan que las ventas de concentrados cayeron un 2%, superando las estimaciones que pronosticaban un descenso del 0,07%. Este retroceso en los concentrados, combinado con la disminución en el volumen de ventas en varias categorías clave, plantea interrogantes sobre las estrategias futuras de Coca-Cola para revertir estas tendencias y continuar con su crecimiento.
En conclusión, aunque Coca-Cola ha mostrado fortaleza en la rentabilidad y ha superado las expectativas de ingresos y beneficios por acción, enfrenta importantes desafíos en términos de volumen de ventas.