La economía colombiana creció en el primer trimestre de este año en 0,7%, de acuerdo a las cifras divulgadas por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE).
La cifra fue superior a las expectativas de los analistas económicos que estimaban que el PIB en los primeros tres meses del año estaría entre el 0,2% y el -0,2%.
El resultado está alineado con las expectativas de los analistas del mercado, cuyas proyecciones variaron entre una contracción de 0,9% y un crecimiento de 1,1%. Específicamente, el Banco de la República había anticipado un aumento más conservador del 0,3%, mientras que BBVA Research había previsto una contracción de 0,9%. Le puede interesar: La producción industrial de Colombia cayó 6,7 % en marzo
Un análisis más detallado muestra que seis de las doce ramas principales de la economía experimentaron contracciones en comparación con el primer trimestre de 2023. La industria manufacturera enfrentó la mayor caída, retrocediendo un 5,9%. También se registraron descensos significativos en las actividades financieras y de seguros, que cayeron un 3%, y en la explotación de minas y canteras, con un descenso del 1,5%.
Otros sectores que mostraron retrocesos incluyen la información y comunicación, con una caída del 1,6%, y el comercio, transporte y alojamiento, que disminuyó un 0,8%. Las actividades profesionales y científicas también sufrieron una leve contracción del 0,2%.
Sin embargo, no todas las noticias son negativas. Seis sectores reportaron crecimiento, destacándose el agro y la administración pública, educación y salud, que aumentaron un 5,5% y un 5,3%, respectivamente. Las actividades artísticas y de entretenimiento también mostraron un sólido crecimiento del 5,2%, mientras que el suministro de electricidad, gas, vapor y aire acondicionado aumentó un 4,5%. Lea aquí: Tres capitales del Caribe lideraron la inflación en abril, entre ellas Cartagena
Además, las actividades inmobiliarias crecieron un 1,7% y la construcción registró un incremento del 0,7%. Estos datos reflejan una economía que, aunque enfrenta desafíos en varios frentes, también encuentra áreas de crecimiento en medio de la incertidumbre global.
Desde la perspectiva del gasto, se observa una notable caída del 13,4% en la formación bruta de capital. El consumo de los hogares se mantuvo bajo, con un aumento de solo 0,6%, mientras que el consumo del gobierno general disminuyó un 0,7%. En cuanto a los bienes de consumo, mientras que los no durables crecieron un 0,8%, los durables y semidurables experimentaron caídas significativas de 8,3% y 6,1%, respectivamente.