El cierre del año 2023 dejaría al Aeropuerto Rafael Núñez de Cartagena con una caída del 12,74% en el tráfico de pasajeros, de acuerdo a las proyecciones que hace su operador, la Sociedad Aeroportuaria de la Costa S.A. (Sacsa). (Lea aquí: ¿Quién se quedará con la concesión del Rafael Núñez?).
María Claudia Gedeón, la encargada de Asuntos Corporativos del administrador de ese terminal aéreo, señaló que las estimaciones indican que este año se movilizarán por el aeropuerto 6,3 millones de pasajeros, 900 mil menos que los reportados el año pasado (7,2 millones).
Ese comportamiento es atribuido, en buena parte, a la salida de operaciones de las aerolíneas de bajo costo Viva Air y Ultra Air, que le aportaban a la ciudad más de 20% de su tráfico aéreo nacional. De cumplirse esas proyecciones, el mercado nacional decrecería 20% para Cartagena y el internacional crecería 40%. También influyen las tasas impositivas a tiquetes aéreos y la desaceleración de la economía.
“Este es un aeropuerto que sigue atrayendo a nuevas aerolíneas y tenemos el reto de seguir creciendo ese tráfico internacional tan importante para que la Cartagena turística siga creciendo. Este fin de año será un año movido. Vamos a tener nuevas rutas, nueva conectividad y la ciudad siga creciendo en materia turística”, señaló la ejecutiva de Sacsa. (Lea aquí: 7,2 millones de pasajeros pasaron por el aeropuerto de Cartagena en 2022).
