El gobernador del Banco de Francia (banco central), Christian Noyer, se congratuló por una revisión “limitada” de las notas de los bancos galos, destacando que de ese modo estos quedan al mismo nivel que los grandes bancos europeos.
Esos matices no impidieron que las acciones de los tres grupos abrieran con bajas pronunciadas en la Bolsa de París: Société Générale caía 5,81%, Crédit Agricole 3,12% y BNP Paribas 5,70%.
El rumor de una degradación de la nota de los bancos franceses circulaba desde el domingo pasado. Esas instituciones se han visto vapuleadas en la Bolsa en las últimas semanas, con pérdidas considerables, acrecentadas por todo tipo de rumores que se han visto obligadas a desmentir con frecuencia.
La nota de Crédit Agricole SA pasa de “Aa1” a “Aa2”, debido a su exposición en Grecia, un país de la Eurozona al borde de la quiebra; de Société Générale pasa de “Aa2” a “Aa3”, a raíz de la revaluación de la ayuda que el banco podría recibir del Estado en caso de crisis grave, indicó un comunicado de Moody's.
La agencia, una de las tras calificadoras más importantes, había anunciado a mediados de junio que podría degradar la nota de los tres bancos debido a que estaban muy expuestos a los riesgos de la crisis de la deuda griega.
Pero decidió dejar sin cambios la nota de BNP Paribas, al que mantiene “bajo vigilancia negativa”, lo que significa que no está a resguardo de una degradación.
BNP Paribas reveló este miércoles una serie de medidas destinadas a infundir tranquilidad al mercado respecto a su grado de exposición a obligaciones de deuda pública.
Aseguró en particular que está en condiciones de administrar un eventual alineamiento de las obligaciones de Estado griego, portugués e irlandés con sus precios actuales, lo cual supondría una fuerte quita, en momentos en que la posibilidad de una reestructuración de la deuda griega dejó de ser un tabú para los líderes europeos.