Este diciembre de 2020 Real Cartagena rememoró los 15 años desde que disputara la final del fútbol profesional colombiano ante el Deportivo Cali. En ese 2005 no obtuvo el título, pero aquel equipo se quedó grabado en el corazón y la mente de los cartageneros.
Mucho ha pasado por el club desde aquellas proezas y en 2020 el equipo no pudo estar más alejado de aquel camino. De pelear por el título en la primera A, Real Cartagena pasó a pelear por evitar el último lugar de la tabla en la B.
Solo un punto evitó que los cartageneros cerraran el año en la última posición de la segunda categoría del balompié nacional, aunque sus estadísticas son dignas de la vergüenza del colero.
No cabe la excusa de la pandemia ni del coronavirus para explicar el terrible año de los auriverdes. Antes del parón en marzo se había disputado 7 fechas y Real solo cosechaba una victoria, un empate y tres goles a favor.
Lo que siguió en el regreso del fútbol en medio de la pandemia fue acorde al proceder de sus directivos, que no armaron un equipo para pelear por el ascenso, pero tampoco cumplieron con sus promesas para el 2020.
En diciembre de 2019 el presidente Rodrigo Rendón pidió una tregua a la hinchada con el argumento de que apostaría por jugadores jóvenes de la ciudad, un proyecto que no prometía logros inmediatos, pero sí a futuro.
Pero la apuesta del dirigente no pasó por los jugadores cartageneros. A principios de año se conoció la llegada de la agencia barranquillera ColombiaGol, que puso al técnico y a la mayoría de los jugadores que disputaron el Torneo BetPlay.
ColombiaGol ha sido hasta ahora una exitosa agencia exportadora de talentos. Su convenio con Real Cartagena, según algunas versiones, buscaba darles minutos a juveniles que pudieran ser vendidos a otros clubes.
Y en eso se quedó el proyecto 2020. En la fase de todos contra todos Real finalizó en el puesto 15 entre 16 equipos, con 12 puntos, uno más que el Barranquilla.
En 17 partidos jugados, los cartageneros solo consiguieron 3 victorias y 3 empates, por lo que se llevaron 11 derrotas. Además, solo marcó ocho goles – solo uno como visitante – y recibió 22 en contra, para una diferencia de -14.
LA VENTA DE REAL ¿ALIVIO O DUDAS?
Tras el duro cierre de año en lo deportivo, llegó una noticia que los hinchas esperaban conocer incluso antes del descenso en 2012.
El equipo fue vendido y la familia Rendón, a la que muchos atribuyen el descenso y los malos resultados, ya no será más la propietaria mayoritaria del equipo.
Helmut Wenning, el propietario de la agencia ColombiaGol, adquirió el 74% de las acciones del club, Rodrigo Alejandro Rendón, hasta ahora el presidente, se queda con el 21% y el Distrito de Cartagena, con el 5%.
Que llegue un nuevo dueño se recibe como un alivio en la afición cartagenera. Pero las dudas por saber a qué le apostarán los nuevos dirigentes se mantienen hasta el cierre de este año.
Tras lo visto en el 2020, no queda claro si con la agencia ColombiaGol, Wenning mantendrá su idea de tener a Real Cartagena como una plataforma para vender a jóvenes jugadores o si su objetivo será devolver al equipo al lugar que pertenece. Y ese lugar es la A.
De esa apuesta depende gran parte de lo que será su relación con la hinchada, una que se ha mantenido fiel durante estos años de fracasos continuos y que espera por fin salir del sótano al que se ha visto condenada por nueve años.