a pesar de las recomendaciones que emitió el Ministerio del Trabajo al decretarse el aislamiento preventivo obligatorio en el país, los clubes del fútbol colombiano están tratando de, dicen ellos, minimizar el impacto económico de la pandemia del Covid-19 (coronavirus).
Para nadie es un secreto que esta crisis de salud que vive el mundo dejará un coletazo social, económico y, quizás, político en cada uno de los países a donde ha llegado el virus. Dadas las circunstancias, los equipos de fútbol en Colombia están sintiendo con fuerza la falta de partidos.
Sin la posibilidad de recaudar dinero por taquillas, con algunos patrocinios congelados -especialmente los de las vallas publicitarias de los estadios- y sin los beneficios de la televisión internacional que prometió el presidente de la Dimayor, Jorge Enrique Vélez, la situación es sensible en las finanzas de los clubes. Incluso, algunos hablaron de cancelar o suspender contratos.
Dadas las circunstancias, Carlos González Puche, presidente de Acolfutpro, precisó que salvo el Junior de Barranquilla, todos los demás equipos del fútbol profesional colombiano han iniciado gestiones para renegociar los salarios de los jugadores, algunos con maneras que para la Asociación son inapropiadas.
La posición de Acolfutpro -con quien ahora sí los clubes quieren negociar, pero en noviembre de 2019 no reconocían- es clara, este es un momento límite, en el que todos deben cooperar y una de las medidas más favorable es que los equipos envíen a los futbolistas a vacaciones colectivas, corriendo las de mitad de año para ahora.
Según González Puche, Cortuluá, Dépor, Real San Andrés, Alianza Petrolera, Real Cartagena, Atlético Huila, entre otros, han tomado esta decisión, la cual no ha trastornado los bolsillos de los futbolistas, ya que como recuerda él mismo, “el Gobierno no ha autorizado a cancelar o suspender contratos, porque los trabajadores necesitan el dinero para mantenerse en el aislamiento”.
En cuanto a la propuesta de reducir el salario de los jugadores, para la Asociación Colombiana de Futbolistas Profesionales “hay formas de negociar y proponer”, señalando como un despropósito la forma en que Santa Fe puso a sus jugadores contra la afición con una encuesta en redes sociales en la que, además, el sí gana con un 62,2 %.
“El siguiente paso, entonces, es decir ‘estos son los jugadores que no quisieron bajarse el sueldo’ y luego pasarle el valor de su salario a los periodistas que se prestan para hacerlo público”, indicó González Puche.
Además, habló del caso de Millonarios, que si bien intenta buscar soluciones, deja unos vacíos muy grandes como no fijar una fecha para que el dinero que no perciban los futbolistas en este tiempo sea pagado una vez pase la contingencia de salud, mucho menos un porcentaje y, además, dejar esas obligaciones a la suerte; “en la medida de lo posible”, dice el documento entregado por las directivas.
“Unilateralmente se abrogan el derecho a modificar las condiciones de tu contrato. Eso es ilegal”, manifestó el directivo de la Asociación de Futbolistas, quien sí ponderó el trabajo de Atlético Nacional, equipo que habló con cada uno de sus jugadores y, según sus ingresos, negoció de manera individual y estableció porcentajes que se compensarán en agosto y septiembre.
La gran preocupación que tiene Acolfutpro es que en el país “hay muchos futbolistas que ganan el salario mínimo ¿A ellos qué les van a rebajar? ¿A menos de lo mínimo que dice el Gobierno que puede sobrevivir un colombiano?” y también criticaron las comparaciones con Ligas de primer mundo.
Hay clubes que pagan bien, que hacen diferencia, pero los demás no. En Sudamérica esta es la Liga que peor paga después de Bolivia.