La Selección Colombia disputó sus dos últimos amistosos del año en los Estados Unidos, en estos enfrentamientos se vio las caras con Nueva Zelanda y Australia, ambas selecciones oceánicas a las cuales derrotó en los encuentros preparatorios previo al Mundial de México, Estados Unidos y Canadá del 2026.
Con un triunfo 2-1 sobre Nueva Zelanda y una goleada 3-0 a Australia, el combinado nacional confirmó su buen momento con destacadas presentaciones. Sin embargo, un hecho ajeno a los terrenos de juego salió a la luz en la tarde de este miércoles. En este se vieron involucrados varios jugadores de la plantilla. Lea aquí: Mundial: la razón por la que Colombia no es cabeza de serie
Se supo que dos jugadores de la Selección Colombia estuvieron muy cerca de ser víctimas de robo en Miami, en la sede donde se disputó el partido ante Nueva Zelanda.
El intento de robo a los jugadores de la Selección Colombia
El periodista Ricardo Orrego en el Blog Deportivo de Blu Radio fue el encargado de revelar lo sucedido. El hecho habría ocurrido en un día libre que tuvieron los jugadores en la concentración.
En su narración Orrego dijo: “Varios jugadores salieron de compras cuando había libertad en la concentración de Colombia y fueron a un centro comercial cercano. Compraron varios iPhone y, cuando se dirigían a una clínica, un jugador (del que no se da el nombre) reporta que los estaban siguiendo”.
“Los de seguridad llamaron a la Policía, quienes interceptaron el sospechoso vehículo que estaba en la carretera. Allí encontraron armas, elementos para cometer robos y guantes de látex”, añadió el periodista. Le puede interesar: Luis Díaz acecha el top de goleadores históricos de Colombia: así va
Gracias a la oportuna intervención de las autoridades, los jugadores pudieron volver luego de sus compras a la concentración. Como se mencionó anteriormente, los nombres de los futbolistas no han sido revelados hasta el momento
Sobre los presuntos atacantes, Orrego sentenció: “Se trata de colombianos, ilegales e indocumentados, que aparentemente integran una banda dedicada al robo en Fort Lauderdale, con un extenso prontuario delictivo en Estados Unidos”.