La Alcaldía de Cartagena dio un paso firme frente a los graves hechos de violencia ocurridos durante el partido entre Real Cartagena y Real Cundinamarca, al interponer una denuncia formal ante la Fiscalía General de la Nación contra los integrantes de la barra brava Rebelión Auriverde Norte, señalados de protagonizar los disturbios dentro y fuera del estadio Jaime Morón León.
El secretario del Interior y Convivencia Ciudadana, Bruno Hernández, acompañado por la gerente de Transcaribe y el director del IDER, radicó la denuncia y solicitó prioridad en la investigación, dada la magnitud de los daños materiales y las afectaciones a la seguridad ciudadana.
Los desmanes dejaron un saldo de siete buses de Transcaribe vandalizados, además de cuatro personas heridas y cuantiosos daños en la infraestructura del estadio. En varios videos difundidos en redes sociales se observan los destrozos en las graderías, el intento de invasión de la cancha y el caos en los alrededores del escenario deportivo. Te invito a leer: Martín Del Río, el hincha del Real Cartagena que murió de un paro cardíaco
La sanción a la barra del Real Cartagena
Como medida ejemplar, el Distrito sancionó a la barra Rebelión Auriverde Norte con dos años de expulsión del estadio Jaime Morón, prohibiéndoles el ingreso a cualquier encuentro, sea oficial o amistoso, del Real Cartagena durante ese periodo.
El alcalde Dumek Turbay fue enfático en rechazar los hechos y envió un mensaje contundente:
“El fútbol es una fiesta donde debe prevalecer la paz, la convivencia y la armonía, sobre cualquier resultado adverso”. Te invito a leer: Así quedaron las graderías del Jaime Morón después de los actos vandálicos
Las autoridades locales aseguraron que no descansarán hasta identificar plenamente a los responsables y llevarlos ante la justicia, reiterando que la violencia no tendrá cabida en el deporte ni en la ciudad de Cartagena.

