El jugador de los Miami Heat Terry Rozier y el entrenador de los Portland Trail Blazers, Chauncey Billups, fueron arrestados en Estados Unidos por su presunta implicación en una red de apuestas ilegales relacionada con la NBA, según informaron este jueves medios estadounidenses.
De acuerdo con los reportes, junto a Rozier y Billups habrían sido detenidas otras cuatro personas que también estarían vinculadas con la investigación que lleva adelante la justicia estadounidense.
El arresto de Rozier ocurrió horas después de la derrota de los Miami Heat ante los Orlando Magic, en el primer juego de la nueva temporada de la NBA. ESPN señaló que el jugador fue capturado en la mañana del jueves en un hotel de Orlando. Lea: Arranca la NBA, el mejor baloncesto del mundo: hora y día de los partidos
Rozier, de 31 años, ya se encontraba bajo la lupa de las autoridades desde 2023, cuando se detectaron movimientos sospechosos de apuestas antes del partido entre los Charlotte Hornets y los New Orleans Pelicans, equipo en el que militaba en ese momento. Las investigaciones apuntan a que esas irregularidades podrían estar conectadas con la red desmantelada esta semana.
Por su parte, Chauncey Billups, actual técnico de los Trail Blazers desde 2021, también fue arrestado dentro del mismo operativo. El exjugador, que hizo historia con los Detroit Pistons y fue incluido en el Salón de la Fama de la NBA, es uno de los nombres más reconocidos entre los implicados.

EE.UU. desmantela dos redes ilegales de apuestas vinculadas con la NBA y la mafia
El arresto de ambos forma parte de una investigación más amplia que llevó a las autoridades estadounidenses a desmantelar dos redes dedicadas al juego y las apuestas ilegales, con ramificaciones en la NBA y vínculos con organizaciones mafiosas.
En total, fueron arrestadas 37 personas en dos operaciones separadas que, según explicó el director del FBI, Kash Patel, se desarrollaron durante varios años. “El fraude es alucinante”, aseguró el funcionario al detallar que se cometieron delitos de fraude informático, extorsión, robo con intimidación y lavado de dinero.
Las autoridades bautizaron las investigaciones como Operation Nothing But Net (“Solo red”), centrada en amaños y apuestas deportivas, y Royal Flush (“Escalera real”), enfocada en partidas ilegales de póquer manipuladas por la mafia.

El fiscal Joseph Nocella Jr. afirmó que el caso deportivo representa “una de las tramas más descaradas de corrupción” en la historia del país, señalando que los acusados usaron información confidencial de jugadores y equipos para apostar miles de dólares y obtener ganancias ilícitas. Posteriormente, ese dinero era blanqueado mediante transferencias bancarias, plataformas digitales y efectivo.
En la investigación paralela sobre las partidas de póquer, el FBI descubrió que las organizaciones criminales utilizaban a deportistas, entre ellos Billups y el exjugador Damon Jones, para atraer apostadores a las mesas. En esa operación, denominada Royal Flush, se incautaron equipos tecnológicos sofisticados, como mesas con rayos X y dispositivos de lectura de cartas, empleados para manipular los resultados a favor de la mafia.
