Los Medias Rojas de Boston se impusieron este martes 3-1 sobre los Yankees de Nueva York en el Juego 1 de la serie de comodines de la Liga Americana.
La victoria se cimentó en una actuación dominante del abridor Garrett Crochet, quien ponchó a 11 bateadores y concedió solo una carrera limpia en 7.2 entradas sin bases por bolas. Lea: Playoffs MLB: Cachorros y Tigres dan el primer golpe de postemporada
La ofensiva de Boston se encargó de producir lo justo y necesario. La carrera decisiva llegó en el séptimo inning con un sencillo de Masataka Yoshida, que rompió el empate y puso arriba a los Red Sox.
Más adelante, un doble de Alex Bregman en el noveno impulsó una carrera adicional que aseguró el marcador final.
En la trinchera rival, los Yankees solo lograron una solitaria anotación gracias a un jonrón de Anthony Volpe en el segundo episodio, aunque no fue suficiente para descarrilar la defensa visitante.
Con este resultado, Boston toma ventaja en una serie al mejor de tres, forzando ahora a los Yankees a ganar en casa para seguir con vida en los playoffs.
El bullpen de los Red Sox resistió con oficio, sobre todo en el noveno capítulo cuando Aroldis Chapman, ex lanzador de Nueva York, logró los outs finales y silenciar la remontada rival.
La serie apenas comienza, pero este triunfo da a Boston un impulso importante tanto en lo anímico como estratégico para continuar su camino en la postemporada.
Las acciones
El duelo comenzó con un ambiente eléctrico en el Yankee Stadium, que recibió a más de 45.000 aficionados. Anthony Volpe encendió la chispa local con un cuadrangular solitario en la segunda entrada, dándole a Nueva York una ventaja tempranera que parecía presagiar una noche positiva para los de casa.
Sin embargo, el dominio de Garrett Crochet desde la lomita apagó rápidamente las esperanzas, pues el abridor de Boston se mostró intratable y retiró a la mayoría de los bateadores sin permitir que la ofensiva rival se enraizara en circulación.
Boston empató en la cuarta entrada gracias a un elevado de sacrificio de Rafael Devers que impulsó a Jarren Duran desde la tercera base. Ese batazo no solo igualó la pizarra, sino que también inclinó el ánimo del encuentro, pues los Red Sox comenzaron a tomar el control del ritmo del juego. Más tarde, Yoshida respondió en el séptimo con un imparable decisivo que puso el marcador 2-1, un golpe que resultó determinante porque quebró la confianza de los lanzadores neoyorquinos.
En la recta final, Alex Bregman dio el batazo de seguridad con un doble remolcador en el noveno episodio que amplió la ventaja a 3-1.
Drama al final
La entrada cerró con drama, ya que los Yankees colocaron corredores en las bases, pero Chapman, con su experiencia y velocidad, retiró los outs clave para sellar el triunfo. Lea:
Boston celebró en el diamante el primer paso hacia la Serie Divisional, dejando a Nueva York con la presión de reaccionar en el segundo juego de la serie al mejor de tres este miércoles a las 5 p. m.