El deporte internacional se estremece ante una gran investigación que acusa al gobierno chino de robar datos cerebrales de atletas de élite, incluido el tenista italiano Jannik Sinner, con fines militares.
La revelación, destapada por el periodista estadounidense Pablo Torre en colaboración con Hunterbrook Media, pone en jaque la privacidad de los deportistas y aviva temores sobre el uso de tecnología neural en la guerra cibernética. Este tema también salió publicado en el Diario As. Te invito a leer: Carlos Alcaraz destrona a Jannik Sinner ante el aplauso de Donald Trump
Según el reportaje “Did China Steal Jannik Sinner’s Brainwaves?”, publicado esta semana en YouTube y plataformas como AS USA, Sinner, finalista del US Open, utilizaba el headset FocusCalm durante sus entrenamientos para mejorar la concentración.
Este dispositivo, fabricado por BrainCo –una empresa fundada en Harvard pero con sede en China–, mide ondas cerebrales, patrones de atención y respuestas neuronales. Sin embargo, Torre alega que BrainCo, financiada por entidades ligadas al Partido Comunista Chino (PCCh) y contratistas militares, ha transferido estos datos sensibles al Ejército Popular de Liberación.
Otros deportistas implicados
La lista de afectados es alarmante: además de Sinner, figuran la tenista polaca Iga Świątek, la esquiadora estadounidense Mikaela Shiffrin, el piloto de Fórmula 1 Charles Leclerc y jugadores del Manchester City, así como miembros de las selecciones olímpicas de Italia.
El médico deportivo Riccardo Ceccarelli compiló esta relación, que incluye a más de una docena de atletas. “No se trata solo de mejorar el rendimiento; estos datos podrían usarse para entrenar supersoldados chinos en aviación, robótica y control mental”, advierte Torre, citando documentos obtenidos por Hunterbrook que vinculan BrainCo con Unitree, una firma de robots humanoides señalada por el Congreso de EE.UU. como herramienta del PCCh.Expertos como la profesora Nita Farahany, de la Universidad de Duke, alertan sobre los riesgos:
La ATP y la ITF han iniciado revisiones urgentes sobre el uso de wearables en entrenamientos, mientras Sinner, de 24 años, se prepara para el China Open (del 24 de septiembre). Te invito a leer: Abierto de EE. UU.: Sinner gana con susto, pero se las verá con Alcaraz
Esta controversia después de que Sinner enfrentó en marzo un escándalo por dopaje accidental con Trofodermin, resuelto a su favor.