Jhon Jáder Durán vivió un debut eléctrico en la Superliga de Turquía con el Fenerbahçe.
El joven delantero colombiano, quien llegó al equipo por pedido expreso de José Mourinho, fue titular en el empate 0‑0 contra el Göztepe. Lea: Bobby Camargo revela convocados del Real Cartagena para duelo ante Leones
Pero su estreno quedó marcado por una acción que encendió la polémica: un codazo al rostro de Allan Godoi cerca del final del primer tiempo que solo le valió una amarilla. Muchos consideraron que debió ser expulsado.
La jugada ocurrió en un contexto tenso: en los minutos previos, el partido ya estaba cargado de reclamos por posibles penales no sancionados, varios favoreciendo al Fenerbahçe, y sin intervención del VAR.
En ese clima, Durán, tras recibir marcaje estrecha, reaccionó con un golpe que, según muchos analistas, fue intencional y merecía una roja directa.
En redes sociales y medios locales turcos la acción generó fuertes críticas.
El exarquero y referente de Fenerbahçe, Volkan Demirel, expresó que una expulsión hubiera sido “muy fuerte”, pero advirtió al delantero: “con el estilo de José Mourinho, Jhon Durán pronto estará en el banquillo” si sigue con ese tipo de conducta.
Por su parte, el periodista Volkan Yılmaz fue aún más tajante: “Es claramente roja para Jhon Durán”.
El impacto del codazo fue más allá del campo. El cotejo finalizó 0‑0, en medio de varias jugadas polémicas, incluido un penal revisado por VAR que terminó en arremetida fallida del Fenerbahçe.
Además, el incidente dejó claro que Durán aún debe ajustarse al control emocional exigido en Europa, especialmente bajo el mando de un técnico estricto como Mourinho.
Ese debut liguero contrasta con sus primeros pasos positivos en el club: en Champions League ya había anotado en la remontada frente al Niza, siendo clave para el avance del equipo.
Debe mejorar su actitud
Sin embargo, su falta de gol ante el Göztepe y la polémica conducta centraron las críticas desde Turquía. Lea: Carlos Alcaraz vs Jannik Sinner: horario en Colombia y dónde ver la final
Este debut deja una lección clara: el talento puede brillar, pero sin disciplina, la continuidad está en riesgo.