La venezolana Yulimar Rojas, plusmarquista mundial, campeona olímpica y mundial de triple salto, pospuso su esperado regreso a las pistas.
La atleta no participó este jueves en el III Meeting Internacional Meliz Sport de Guadalajara, como estaba previsto, debido a una sobrecarga muscular que la llevó a priorizar su preparación para el próximo gran reto: el Mundial de Atletismo de Tokio, que se celebrará del 13 al 21 de septiembre. Lea : Juegos Intercolegiados: estudiantes muestran su talento en sana competencia
Rojas confirmó a EFE que su objetivo es claro: revalidar el título que ganó en la capital japonesa, donde también conquistó el oro olímpico. “Voy con todo a revalidar mi título mundial, lo que supone para mí una motivación extra”, expresó con determinación, dejando claro que la cita en Tokio es el centro de su temporada.
La atleta atraviesa un momento clave en su carrera, después de superar una grave lesión en el talón de Aquiles que la dejó fuera de los Juegos Olímpicos de París 2024. Pese a algunos altibajos en su recuperación, aseguró que está enfocando “toda la preparación” en llegar en óptimas condiciones a la capital japonesa para luchar por un nuevo título mundial.
Su entrenador, Iván Pedroso, también habló con EFE y explicó que la decisión de no competir en Guadalajara se tomó para evitar riesgos innecesarios.
La sobrecarga muscular detectada podría complicar la recta final de la preparación, por lo que optaron por descansar y continuar con los entrenamientos planificados.
En el Meeting Internacional Meliz Sport, que abrió el calendario en la capital alcarreña, el protagonismo recayó en las lituanas Diana Zagainova y Dovilè Kilty, quienes registraron un mejor salto de 13,95 metros.
La ausencia de Rojas dejó el concurso sin una de sus grandes figuras, aunque aumentó la expectativa de su regreso en Tokio.
Será un regreso histórico
Con la mira puesta en septiembre, Yulimar Rojas se prepara para un reencuentro con la pista y con la historia. Lea: Colombianos en las grandes ligas europeas: así será su debut en la temporada
Tokio no solo significa el escenario de sus mayores logros, sino también la oportunidad de demostrar que sigue siendo la reina indiscutible del triple salto mundial, aun después de una lesión que pudo cambiar el rumbo de su carrera.