Mary José Álvarez, defensora central de 19 años, originaria del barrio 20 de Julio en Cartagena, hizo parte de la selección Colombia en la Copa América Femenina 2025, celebrada en Ecuador entre el 11 de julio y el 2 de agosto.
Formada en el Bechara FC y La Villa FC, luego jugó en Formas Íntimas y hoy por hoy milita en el Atlético Nacional. Lea: Copa América Femenina: Brasil festejó el título, pero Colombia lo dejó todo
Perteneciente al grupo que se conoce como las “Superpoderosas”, junto a figuras como Linda Caicedo, Mayra Ramírez y Catalina Usme, Mary José fue convocada al equipo absoluto en un proceso que inició desde el Mundial Sub‑17 y los Juegos Bolivarianos de 2022.
En esa categoría logró la medalla de plata en el Mundial Sub‑17 (India) y el oro bolivariano, convirtiéndose rápidamente en una referencia en la zona defensiva.
En la competición continental, tuvo una participación destacada aunque breve: fue titular en el contundente triunfo 8‑0 ante Bolivia, disputando los 90 minutos, y sumó 19 minutos como sustituta en el empate 0‑0 frente a Brasil en fase de grupos.
Más allá del tiempo en cancha, su presencia fue clave por su solidez, entrega y capacidad de entrenamiento, lo que la mantiene como una opción estratégica para el equipo.
Colombia llegó a la final tras eliminar a Argentina en semifinales por penaltis (5‑4), en un duelo de máxima tensión que consolidó el carácter competitivo del equipo dirigido por Ángelo Marsiglia.
En la final ante Brasil en Quito, el partido terminó 4‑4 tras tiempo extra y se decidió en la tanda de penales, donde las cafeteras cayeron 5‑4, asegurando el subcampeonato continental.
Gracias a este logro, Colombia se adjudicó la medalla de plata, su primer podio histórico en la Copa América femenina, detrás de Brasil como campeona y Argentina en el tercer puesto tras vencer a Uruguay por penales.
Para Mary José, este fue su primer podio con la selección mayor, un momento clave en su carrera que abre puertas a futuros llamados y consolidación en el equipo nacional.
Una historia de superación
La historia de superación personal de Álvarez tiene raíces profundas: su madre trabajó como mototaxista en Cartagena para apoyar su desarrollo futbolístico.
Este respaldo familiar y su espíritu trabajador reflejan que Mary José representa no solo el presente, sino también una nueva esperanza y orgullo para el fútbol femenino cartagenero y colombiano.