Con 45 años y desafiando todos los pronósticos, Venus Williams volvió a sonreír en el circuito profesional. Este martes, la leyenda del tenis estadounidense venció por 6-3 y 6-4 a su compatriota Peyton Stearns en su debut en el cuadro individual del Washington Open, logrando así su primera victoria en un partido oficial en casi dos años.
Su regreso ya había sorprendido cuando días atrás aceptó una carta de invitación para disputar el torneo, tras 16 meses de inactividad —desde el Masters 1.000 de Miami en 2024—, lo que llevó a la WTA a clasificarla como “jugadora inactiva”. Lea aquí: La gigante del tenis que volverá en el abierto de Washington: hay expectativa

Ya el lunes había dado señales alentadoras al imponerse en dobles junto a Hailey Baptiste, pero la gran cita llegó en la noche del martes, en la pista central del Rock Creek Tennis Center, donde el público la ovacionó al reaparecer en singles.
La marca impuesta por Venus Williams
En frente estaba Stearns, número 35 del mundo y 23 años, nacida un mes después de que Venus conquistara su cuarto título de Grand Slam en el US Open del 2001 ante su hermana Serena.
El cruce fue especial por ese contraste generacional, pero también por lo simbólico: Williams se convirtió en la jugadora de mayor edad en ganar un partido oficial desde que Martina Navratilova lo hiciera con 47 años en Wimbledon 2004. Le puede interesar: Masters 1.000 de Toronto: las grandes ausencias que tendrá el torneo
La última vez que Venus había conseguido una victoria en el circuito fue en agosto de 2023, cuando derrotó a la rusa Veronika Kudermétova en el Masters 1.000 de Cincinnati. Su triunfo en Washington marca un emotivo regreso de una figura histórica que sigue demostrando que su legado aún tiene capítulos por escribir.
